El objetivo de Patriots está a dos semanas del encuentro que finalizó en derrota. Fue un resultado anecdótico porque el conjunto de Bill Belichick ha sido el mejor de la Conferencia Americana durante la temporada regular y tenía asegurado el primer puesto tras el triunfo ante Jets la semana anterior.

Así, lo que pudo haber sido un duelo comprometido, culminó en un partido anodino.  Bills perdió toda chance de clasificar a postemporada hace siete días en la increíble derrota ante uno de los peores conjuntos de la NFL, Oakland Raiders. Luego de la lesión de su mariscal titular EJ Manuel, el veterano Kyle Orton mantuvo las esperanzas de la franquicia, aunque no le alcanzó en aquella irrisoria debacle.

No obstante, la estructura defensiva de Buffalo fue su caballo de batalla. Al menos, el equipo del estado de New York pudo terminar con marca ganadora tras 10 temporadas de fracasos. Y esta campaña podría ser el puntal para el despegue a futuro.

En tanto, New England utilizó a Tom Brady apenas en la primera mitad, relegó a su estrella Rob Gronkowski y tampoco contó con otros cinco titulares ante Bills. Así y todo, una marca negativa se lleva Patriots a cuestas porque acumulaba 35 victorias en casa ante equipos de la AFC. Además, Buffalo acumulaba 12 encuentros sin triunfos en el Gillette Stadium.

Durante los cuatro períodos, se patearon cuatro goles de campo exitosos (3 de Gostkowski y 1 de Carpenter) y solo se marcaron dos touchdowns: el primero fue tras un pase de Orton hacia Robert Woods y el segundo con un acarreo de Boobie Dixon.