-AFC Oeste: Broncos manda y los demás se acomodan. El equipo de Peyton Manning sigue invicto, Chiefs bajó rotundamente respecto al 2014, Raiders podría despertar y Chargers aún es un enigma.

Denver Broncos: El conjunto de Peyton Manning ha cambiado y ahora defiende mejor de lo que ataca. Las incorporaciones de 2014 están dando frutos y la muralla es de las mejores de la Liga. De hecho, es su defensa la que ganó la mayoría de los encuentros de este año, producto de su eficacia. En tanto, Manning ya no es tan preciso y sufre muchas intercepciones. Al menos, esto se vio en los últimos partidos, a pesar de las 1524 yardas sumadas. El veterano mariscal de campo tiene 10 intercepciones y 7 touchdowns. Al menos, Sanders y Thomas siguen atrapando lo que le llega. Por su parte, el juego terrestre sigue ausente. Estos Broncos han mutado, aunque necesitan la precisión del líder para lograr un año con gloria.

Kansas City Chiefs: que Smith si, que Smith no. La polémica por el liderazgo de la ofensiva continúa. En realidad, se avivó la llama y, para colmo, la lesión de Jamaal Charles podría ser catastrófica para Chiefs. Andy Reid deberá recurrir a su magia para reencontrar el rumbo de una ofensiva devaluada. Chase Daniels es el suplente de Smith y no ofrecería garantías en caso de ingresar por el titular. Además, Davis y West son incógnitas para reemplazar a Charles. Igualmente, lo más preocupante es la defensa, que fue muy buena el año pasado y ahora permite demasiados puntos.

Philip Rivers

Oakland Raiders: Dereck Carr fue una gran apuesta de la franquicia y, a pesar del 2014, ahora los receptores encuentran sus lanzamientos. Raiders superó a Ravens y a Browns y le gustó la idea de ganar partidos. En la defensa está mejorando y el diagnóstico es de un equipo con mejoras. Además, con las miserias del resto de los integrantes de la división, posiblemente encuentre algunas migajas que lo favorezcan, pero eso deberá capitalizarlo en los duelos entre sí.

San Diego Chargers: nada de lo pronosticado para esta franquicia se está cumpliendo, salvo que Philip Rivers tendría un buen año magnífico. La ofensiva aérea siempre está para llevar adelante el juego del equipo, pero por tierra Melvin Gordon parece insuficiente. La defensa está haciendo agua contra las ofensivas rivales –sobre todo terrestres- y sin una estructura sólida será complicado el ingreso a los playoffs. Solo superó a los conjuntos más débiles, como Browns y Lions, pero sucumbió ante los de un mismo nivel.

-AFC Este: la presencia de Patriots obliga al resto a pelear por el segundo puesto. El crecimiento de Jets y –en menor medida- de Bills genera mayor competitividad y esto es positivo para la división.

Buffalo Bills: Rex Ryan había cumplido un ciclo en NYJ y llegó para refundar un equipo en crisis. El resultado fue inmediato, pero lo llamativo es que la ofensiva despertó antes que la defensa, una especialidad en el entrenador. Tyrod Taylor ha sido una sorpresa y el juego terrestre está funcionando, a pesar de que aún no apareció LeSean MacCoy como lo conocimos en Eagles. Habrá que ver que sucede con el joven mariscal porque sufrió una lesión –la línea ofensiva no lo protege adecuadamente- y lo reemplazará EJ Manuel. No hay que ilusionarse con Bills pero al menos podrían olvidarse de las rachas perdedoras.

Miami Dolphins: explotó todo. La directiva echó al entrenador Joe Philbin y promovió a Dan Campbell –ya ganó en su presentación- para hacerse cargo de un equipo en llamas. Los últimos años fueron lamentables y en declive, a pesar de contar con un talentoso quarterback como Ryan Tannehill. Pero si no está bien rodeado o las indicaciones son confusas, su capacidad se diluye y es desperdiciada. Miami es la franquicia que menos puntos anotó en 5 semanas. Y las llegadas de Ndamukong Suh y Jordan Cameron tampoco sirvieron para fortalecer la defensa, que parece firme, aunque flaquea durante los partidos porque el grupo estaba golpeado. La victoria ante Titans demostró que el cambio era necesario.

Ryan Fitzpatrick

New England Patriots: este equipo cumple con todos los requisitos para ser considerado el mejor. Ofensivamente es contundente y hasta vistoso. Defensivamente luce ordenado y está constituido con firmeza en todas sus líneas. Por algo es el actual campeón. Tom Brady y Rob Gronkowski son los pilares de un ataque agresivo y que desconoce límites. El juego terrestre sigue siendo un factor complementario y esto podría repercutir en el veterano quarterback porque no tiene descanso alguno. Mantener la plantilla es uno de los grandes aciertos de Bill Belichick para seguir siendo competitivos y ambiciosos.

New York Jets: la ida de Rex Ryan a Bills no fue para nada negativa. En enero, Jets lo reemplazó por Todd Bowles, ex coordinador defensivo de Cardinals. Así, la franquicia confirmó en el campo lo que venía insinuando en los papeles: primero debía armar una defensiva sólida para luego dedicarse al ataque. Y, como segunda medida, fabricó una ofensiva terrestre segura antes que probar con un juego aéreo experimental. La lesión de Geno Smith obligó a incluir a Ryan Fitzpatrick como conductor ofensivo. El quarterback pasó sin pena ni gloria por seis franquicias, aunque en Jets cumple con el guión sin romper moldes y con efectividad. Además, Brandon Marshall encajó a la perfección, mientras Chris Ivory y Bilal Powell rompen filas con sus acarreos. Ojo con NYJ.

-AFC Norte: no es sorpresivo que Bengals se haya apodado de la división por encima de Ravens y Steelers. Estos equipos perdieron valores defensivos antes de la temporada y Baltimore lo están pagando, mientras Pittsburgh recompone lentamente su unidad. Browns trata de asomarse y da pelea aunque pierda.

Baltimore Ravens: la salida de Haloti Ngata hacia Detroit debilitó a la unidad más segura de Baltimore de los últimos años. Esta flaqueza está desintegrando al grupo y las derrotas ante 49ers, Oakland y Cleveland parecían inesperadas. La ofensiva todavía anota puntos porque Forsett corre y Smith atrapa, a pesar de las bajas de los receptores, pero Flacco tiene muchos altibajos sin Owen Daniels (en Broncos). El desequilibrio deberá corregirse pronto, de lo contrario no verá playoff esta temporada.

Le'Veon Bell

Cincinnati Bengals: con el resurgimiento de Andy Dalton como conductor del ataque, Cincinatti está en su mejor momento en años. Todos aguardan lo que suceda co esta franquicia en un posible escenario de postemporada, ya que cada vez que cruza esa barrera, es detenido de inmediato. Lo llamativo es el rendimiento de Dalton, un mariscal duramente criticado, pero que supo hacer oídos sordos a los comentarios y la está descosiendo. Este equipo sabe explotar el juego aéreo y el terrestre, por lo tanto, ofrece demasiadas armas para los rivales.

Cleveland Browns: lo mejor que le pudo pasar a Browns es que despertó su ofensiva, la unidad más flaca de su historia. Ahora, el tema es que como creció su ataque, también tiene algunos problemas en defensa, sobre todo cuando sus contrincantes corren con el balón. La llegada de Josh McCown fue el gran acierto de la directiva, ya que se despertó el juego de pases, junto a Travis Benjamin y Gary Barnidge. Sin embargo, debe continuar ajustando detalles para no perder partidos ganables, como los juegos ante Oakland y Chargers, pero al menos pudo doblegar a Ravens y Titans.

Pittsburgh Steelers: nada comenzó bien para el conjunto de Mike Tomlin, cuestionado en estos años por el armado de la defensiva. Sabido era que el trío ofensivo –Roethlisberger-Bell-Brown- haría estragos contra cualquier defensiva. Ahora, la trinchera era un misterio, pero lentamente el problema está solucionándose de a poco con los triunfos recientes. DeAngelo Williams llegó para suplir a Le'Veon Bell en las fechas iniciales, pero el corredor se transformó en un arma inesperada y valiosa. Lamentablemente, Big Ben se lesionó y ahora todo depende de su recuperación. Sin él, Steelers jamás podría aspirar a la clasificación. Landry Jones ha sido una gran revelación tras el fracaso de Vick como quarterback suplente.

-AFC Sur: Solo Colts se erige como equipo ganador en este grupo, a pesar de sus juegos problemáticos. El resto, aún debe reagruparse para ver si sale a flote de una vez.

Houston Texans: aun tiene pendiente el establecimiento de un mariscal de campo confiable y a largo plazo. Brian Hoyer y Ryan Mallett llegaron y todavía pelean por la titularidad. Sin embargo, Hoyer parece haber desplazado a Mallett ante Colts y esto podría ser definitivo. Las yardas sumadas por aire representan buenos números para la franquicia, pero en puntos anotados está entre las más flojas y por ello solo ha ganado un encuentro. Hasta que Arian Foster no se recupere completamente, el ataque seguirá igual, inclusive con el buen rendimiento de Hopkins. En defensa, está pasando el peor momento en años.

Indianapolis Colts: el presente de Andrew Luck no es el mejor y tampoco el de todo el equipo. Matt Hasselbeck ingresó algunas semanas para suplirlo cuando se lesionó Luck y rindió bien, pero el juego aéreo no está firme. Por tierra, se espera que Frank Gore rompa todo lo que se le cruza y es una buena opción, pero la línea ofensiva está acostumbrada a lanzar. El poder de fuego mermó respecto al 2014 y la defensa luce igual. La relación de Chuck Pagano con la directiva y con el plantel no pasa por su mejor momento y esto podría condicionar el rendimiento del equipo. El “fake-punto” ante Patriots fue el papelón del año.

Jacksonville Jaguars: nada parece haber cambiado por Jacksonville y los resultados son una muestra de que, aunque cambien figuritas, el álbum nunca se completa. Cada temporada, Jaguars experimentan modificaciones en sus plantillas sin mejoras. Sin embargo, con Blacke Bortles la ofensiva aérea podría empezar a despegar para transformarse en una unidad respetable. Además, salvo el partido contra Patriots y el triunfo con Miami, el resto de los juegos los perdió con bastante hidalguía. Posiblemente, en Jaguars, haya que mirar el vaso medio lleno.

Tennessee Titans: tiene una de las defensas que menos yardas permitió por pases en la NFL, pero cuando le corren flaquea demasiado. Así y todo, no recibió muchos puntos y este es un buen indicio para empezar a mejorar. A partir de la defensa, se apuntalan los equipos competitivos. ¿Y el ataque? La temporada comenzó con las expectativas por las nubes, con la presentación espléndida de Marcus Mariota. Ciertamente, el inicio ante un equipo como Tampa Bay fue demasiado fácil para el quarterback debutante. Luego, la realidad golpeó a su puerta y a su humanidad hasta su lesión. Para colmo, el ataque terrestre no es bueno y esto le evita descansar. En definitiva, la ofensiva debe encontrar la fórmula con un mariscal novato y talentoso.