Todo hacía presagiar dos partidos fáciles y cómodos para los dos conjuntos locales pero no fue así para uno de ellos. Los Philadelphia Eagles no mantuvieran la victoria en casa ni la ventaja de 13 puntos que llegaron a tener en el marcador.

Miami Dolphins (4-5) 20-19 Philadelphia Eagles (4-5)

Los Miami Dolphins y los Philadelphia Eagles se entraban en un duelo de mitad de tabla. Todo parecía pronosticar que los de casa se llevarían facilmente el partido debido a unos cuantos factores que marcaban el partido antes del inicio. Los Miami Dolphins venían de un desastroso partido en su último duelo divisional frente a Bills donde Karlos Williams y LeSean McCoy acumularon en total 250 yardas por carrera, por otra parte los Eagles tuvieron dos semanas para preparar este partido ya que tuvieron su bye la pasada semana y el último factor tenía dos nombres propios: Matthews y Murray.

El primer drive corrió a cargo del equipo visitante que tras jugar la mayoría de snaps por aire con Landry y Miller como aliados de Tannehill conseguirían ponerse 3-0 en el marcador, pronto se verían las primeras impresiones de la defensiva en el partido. En el primer drive de Philadelphia solo haría falta un snap para que el tight end de los Eagles corriera desde la yarda 40 hasta la 8 de los Miami Dolphins tras un pase de Bradford, no parecía cambiar nada respecto a los últimos partidos. Tres jugadas más tarde el primer touchdown del partido correría a cargo de Huff que pondría el 3-7 a los seis minutos de partido. Pero el desastre de los Dolphins no se acababa ahí, por tercera e increíble vez consecutiva el equipo de Miami concedería otro safety a su rival aumentando la ventaja a 3-9. Y el siguiente drive no sería una excepción, otra vez y por segunda vez en el cuarto el equipo de casa anotaría otro siete puntos de la mano de Matthews aumentando la distancia difícil de remontar de 3-9 a 3-16.

El siguiente drive ya en el segundo cuarto sería el del rookie Ajayi quien en 2 acarreos haría nada más y nada menos que 50 yardas para terminar la jugada en otro field goal para Andrew Franks dejando el 6-16 en el marcador. Las jugadas curiosas no se limitarían solo a el safety de los Dolphins ya que en la siguiente jugada los Miami Dolphins bloquearían un punt quedándose en la yarda 12 de los locales y consiguiendo Lamar Miller el touchdown un snap después a pase de Ryan Tannehill. El partido empezaba a ponerse interesante pero una de las asignaturas pendientes de los visitantes era mantener la concentración en esos compases del encuentro. Con este resultado nos iríamos al final de la primera mitad.

Tras un tercer cuarto irrelevante salvo por la lesión en un hombro de Sam Bradford que hacía entrar al terreno de juego a Mark Sanchez, los Miami Dolphins aprovecharían para nada más empezar el definitivo cuarto anotar con un poco de suerte un touchdown a manos de Landry tras pase de Tannehill en la red zone. Solo tardaría un drive en reducir diferencias Caleb Sturgis, ex kicker de los Miami Dolphins con un field goal poniendo en el marcador el 20-19. Las malas noticias seguirían para Philadelphia ya que en ese drive volvería a lesionarse Sam Bradford, siendo retirado de nuevo. Parecía decantarse al final para el equipo local pero con Mark Sanchez en el campo y en la red zone, Reshad Jones intercepta a falta de cuatro minutos para intentar agotar el reloj, todo parecía que terminaría así para Dolphins e Eagles pero a falta de 1:52 en el reloj la posesión volvía para los locales, todo el campo los separaba de la victoria, victoria que no conseguirían.

AFC East
New England Patriots 8-0
Buffalo Bills 5-4
New York Jets 5-4
Miami Dolphins 4-5
NFC East
New York Giants 5-4
Washington Redskins 4-5
Philadelphia Eagles 4-5
Dallas Cowboys 2-7

Cleveland Browns (2-8) 9- Pittsburgh Steelers (6-4)

Tras la lesión en el último partido del quaterback de los Steelers toda esta semana estaba llena de interrogantes en cuanto a su titularidad que a medida que pasaban las horas se hacía cada vez menos probable. Lo mismo ocurrió en el lado visitante que inició con Johnny Manziel de titular ante la lesión de Josh McCown que se colocó en la lista de inactivos horas antes del inicio del encuentro. Era entonces un duelo de quaterbacks suplentes pero todo parecía indicar que sería el equipo local el que se llevaría el encuentro.

En el primer drive Pittsburgh saborearía el touchdown tras ser comandado por Landry se quedarían en la yarda 6 de Cleveland para anotar un field goal. Los Browns responderían rapidamente empatando el encuentro en el siguiente drive donde Manziel se saca de la manga un pase de 61 yardas para Benjamin que no conseguiría materializar en touchdown, el marcador se igualaría al final del drive. Las cosas se complicaban para los locales ya que lesionado, Landry Jones dejaba su puesto al cuestionado Ben Roethlisberger.

Con "Big" Ben en el campo seguría sin conseguirse ese primer touchdown del partido, tras encontrar como mejor socio a Martavis Bryant, "Big" Ben no conseguiría llegar a la zona de anotación, quedándose en la yarda 20 para conseguir nuevamente un field goal, aumentando de nuevo en 3 la diferencia en el marcador. Con este marcador se llega al fin del primer cuarto donde los últimos instantes de este y los primeros del siguiente estarían marcados por la falta de actividad.

Durante el encuentro y en concreto el segundo cuarto, en el baile de punts y field goals saldrían beneficiados los Steelers que se pondrían 8 puntos más encima del marcador tras un touchdown de Antonio Brown y la posterior conversión de dos puntos de los Steelers colocándose antes del aviso de 2 minutos 3-14 a favor en el marcador. Todavía habría tiempo en un minuto y medio para que Big Ben conectase con Martavis Bryant y anotara el último touchdown de la primera parte con 31 yardas de pase, 286 en total para el quaterback local. Con 3-21 se iban al descanso.

Nada relevante pasaría durante el tercer cuarto, donde siguiendo la dinámica del encuentro, los Steelers dominaban y los Browns aguantaban hasta que un field goal de los locales parecía sentenciar el partido. Pero los Browns y Manziel no bajarían los brazos ya que seguirían luchando hasta el final del encuentro. Pronto al iniciar el último cuarto Manziel conectaría con su tight end Barnidge para acortar distancias en seis puntos debido a la no anotación de dos puntos.

Lo mismo le pasaría a los Steelers que en el siguiente drive y tras un touchdown de 56 yardas de Antonio Brown tras una recepción de Ben Roethlisberger no anotaría el punto extra poniendose 9-30 en el marcador. Así terminaria el encuentro con un claro ganador y dominador del partido y un excelente Manziel en el campo.

AFC North
Cincinnati Bengals 8-0
Pittsburgh Steelers 6-4
Baltimore Ravens 2-7
Cleveland Browns 2-8