Sucede todos los domingos. Algunas veces hay más ejemplos, otras veces son unos pocos. Pero sucede todos los domingos. En la NFL, ningún partido está definido de antemano. En la Semana 16 de la temporada (con un sólo fin de semana de actividad restante), Atlanta Falcons y St.Louis Rams demostraron la veracidad de esta afirmación.

El primero de estos dos equipos fue el encargado de quitar el invicto de Carolina Panthers y, con ello, la posibilidad de la tan ansiada 'temporada perfecta'. Más tarde -en uno de los partidos "semi nocturnos"-, los Rams derrotaron a Seattle Seahawks, dejándolos sin chances de consagrarse en la División Oeste de la NFC.

(14-1) Carolina Panthers - Atlanta Falcons (8-7)

Contra cualquier pronóstico, Atlanta venció a los Panthers por 20-13, terminando con el invicto del conjunto dirigido por Ron Rivera y (por ese entonces) manteniendo la esperanza de clasificar a la postemporada.

Newton: 17/30, 142 yardas y 0 TD Ryan: 23/30, 306 yardas y 1 TDLa realidad es que, cuando Cam Newton anotó el primer touchdown del encuentro -en un acarreo de 8 yardas-, todos anticipaban otra sencilla victoria para Carolina. En las últimas cinco semanas, Newton, el mariscal de campo de Carolina y probablemente el próximo Jugador Más Valioso de la NFL, había disfrutado de un nivel excepcional.

Ésta vez, tanto Matt Ryan -QB de Atlanta- como la defensa de los Falcons le ganaron el duelo. Devonta Freeman igualó el marcador con un acarreo propio, aunque luego Graham Gano (pateador de Carolina) le volvía a dar la ventaja a los suyos.

Sobre el final del tercer cuarto, apareció la jugada del partido. Julio Jones atrapó una bomba de Ryan y anotó el TD que terminaría siendo definitivo en el marcador final. En dos ocasiones, Newton tuvo la posibilidad de marchar para empatar o ganar el encuentro, pero un fumble terminó dándole el triunfo a los Falcons.

(7-8) St.Louis Rams - Seattle Seahawks (9-6)

Casi tan inesperado como el triunfo de los Falcons fue la victoria de St.Louis, que derrotó a los Seahawks por 23-17. De la mano de una excelente defensa y un Todd Gurley inspirado, los dirigidos por Jeff Fischer -que no tenían nada por que jugar- dejaron a los bicampeones de la NFC sin posibilidades de ganar su división.

La defensa de los Rams produjo tres pérdidas: 1 intercepción y 2 balones sueltosLa primera gran jugada del encuentro ocurrió en el primer cuarto, cuando Akeem Ayers (liniero defensivo de los Rams) recuperó una pelota suelta y la devolvió para un touchdown. Minutos más tarde, ya en el segundo período, Kenny Britt venció a Richard Sherman -uno de los mejores esquineros en la liga- y Case Keenum (QB de St.Louis), lo encontró para un pase de anotación de 28 yardas.

Russell Wilson y los Seahawks intentaron una remontada, que parecía encaminarse luego de que Doug Baldwin atrapase un TD de 25 yardas. Sin embargo, cuando más lo necesitaba su equipo, apareció la figura de Gurley, el novato que figura como uno de los mejores corredores actuales -y, obviamente, a futuro- en la NFL. El corredor anotó el TD definitivo, que terminó por liquidar el pleito.

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