Los de la gran manzana estaban obligados a vencer si no querían despedirse de la final. NY debía plantear un partido sin fallos, además de contar con su defensa y portería al 100%. Así fue, los locales vieron cómo se produjo la reaparición del gran Henrik Lundqvist, el portero sueco hizo recordar a todo el Madison Square Garden el por qué fue coronado en su día como rey de Nueva York. Manteniendo su portería a salvo, el goalie volvió a brillar, después de un comienzo de temporada algo irregular anoche mostró el por qué es el alma de la franquicia.

Con un aforo completo apoyando al conjunto de Alain Vigneault dio comienzo el que iba a ser el uno de los partidos definitivos. Y es que, los Kings están a tan sólo una victoria de proclamarse campeones. Los visitantes dominaban la contienda, con una delantera en auge resurgida en estos playoffs. No obstante, fue Pouliot el que rompió el marcador aprovechando un powerplay a los 7 minutos del comienzo del encuentro. Desde el mismo instante del gol de los locales, comenzaron las cometidas de Los Ángeles, encontrándose con un soberbio Lundqvist, demostrando el recital que iba ofrecer durante toda la noche.

Comenzó el segundo periodo, con unos Rangers fuertes, pero sin llegar con demasiado peligro a la portería de Quick. Sin embargo, apareció de nuevo la luz para los neoyorkinos, en 6 minutos Martin St. Louis hizo el 0-2 y el estadio se fue abajo, con un público entregado que veía cómo aumentaba su ventaja y soñaban con el milagro de mantenerse vivos. Tras una jugada con Kreider y Derek Stepan, St Louis se abrió en el hielo para poder aprovechar un rechace de Quick y perforar su meta. Octavo gol para el canadiense en postemporada. Dos minutos más tarde, como no podía ser de otra forma, Dustin Brown superó la meta rival en un mano a mano con Lundqvist, un gran tercer periodo aguardaba en la gran manzana.

Último tercio en el que los visitantes debían dar la vuelta a un partido que no pintaba bien. Únicamente habían superado la meta rival en una ocasión, a pesar de las múltiples acometidas durante todo el partido. Rebasar de nuevo al sueco no iba a ser tarea fácil. No obstante, nada se plantea imposible para el conjunto californiano, y es que Los Ángeles Kings es un equipo que crece en la adversidad. Así fue, lo intentaron durante todos los minutos del último periodo, pero el guardameta local continuaba haciéndose grande, un recital del portero que obviamente se llevo el primer puesto como estrella del partido con 40 paradas.