A Olli Maatta, defensa de segundo año de los Pittsburgh Penguins, se le detectó en pretemporada un pequeño tumor en la glándula tiroides con el 85% de posibilidades que sea cancerígeno. El jugador, que ha seguido trabajando hasta ahora y suma unos números de un gol y cuatro asistencias en siete partidos, será operado de ese tumor la semana que viene.

Los Pens esperan que, aunque el tumor pueda ser cancerígeno, no sea necesaria quimioterapia o radiación y esperan una recuperación completa del defensa, que se podría perder hasta un mes de competición.

Maatta, que ha promediado unos 20 minutos por partido y a sus 20 años es uno de los pilares en ambos lados del hielo de la defensa , jugará los cuatro encuentros con la franquicia esta semana. Su baja va a suponer un crecimiento de nuevo en el rol de Paul Martin y la aparición de un defensa del equipo filial, probablemente Scott Harrington, mientras Robert Bortuzzo no se incorpora al equipo debido a la lesión que arrastra.