Los jugadores de la selección rusa, tras perder la final del World Championship of Hockey por 6-1 frente a Canadá, decidieron marcharse al vestuario antes de tiempo sin escuchar el himno del justo vencedor del torneo. Tres meses después, la IIHF ha decidido sancionar a la Federación Rusa de Hockey con 85.000 dólares de multa (en forma de 80 mil francos suizos). El tajante comunicado mediante el cual se ha sabido esta sanción deja claro que la multa es por "un movimiento de cabeza inequívoco del capitán de la selección", es decir, Ilya Kovalchuk.

Aunque sí que es verdad que Kovalchuk quiso que todos sus compañeros se fueran al vestuario no todos los integrantes del combinado ruso le hicieron caso. El caso más claro fue el de la estrella de los Washington Capitals, Alexander Ovechkin, que, a parte de quedarse en el hielo durante el 'O Canada', intentó que sus compañeros no hicieran caso al capitán y mostraran respeto al equipo que les había vencido con total justicia. Otros de los jugadores que también se quedó mostrando así su deportividad fue uno de los crack de los Penguins (y compañero de equipo de Sidney Crosby) Evgeni Malkin.

El presidente de la International Ice Hockey Federation, Rene Fasel, ya mostró su total indignación y rechazo ante estas acciones del combinado ruso en su momento, por lo que era de esperar llegara una sanción importante a la Federación Rusa. Justo después del incidente, estas fueron las palabras de Fasel: "La IIHF tiene su propio protocolo y esto recibirá algún tipo de castigo". También, el presidente de esta organización se mostró muy enfadado cuando vio lo sucedido ya que afirmó que "en los 29 campeonatos del mundo que he tenido el honor de asistir, esta es la primera vez que veo algo así".