Tras un fulgurante inicio de partido y un infartante tercer periodo, los aficionados presentes en el Amalie Arena anoche pudieron celebrar el empate conseguido por su equipo, los Tampa Bay Lightning, en la final de la Conferencia Este frente a los Pittsburgh Penguins. No obstante, Tampa tiene ante sí un duro camino ya que los dos próximos partidos de la serie habrán de disputarse en el feudo de los Penguins.

Comenzarían de forma sólida y fuerte los locales, mandando en el partido desde el primer minuto gracias al tanto conseguido por Ryan Callahan tras desviar al fondo de la red defendida por Matt Murray un disparo lejano del sueco Victor Hedman. Las oportunidades más claras continuarían cayendo para el lado de los Bolts y gracias a eso llegaría el segundo tanto firmado por Andrej Sustr tras una buena combinación.

No mostraron indicios de reacción en el segundo periodo los de Pittsburgh y pese a contar con alguna ocasión para poder abrir el marcador, no lograban batir al joven Andrei Vasilevskiy para poder meterse de nuevo en el partido. Todo lo contrario sucedía en el lado contrario, donde Tampa rentabilizaba de forma perfecta sus ocasiones para lograr otro par de tantos obra de Jonathan Drouin durante una superioridad y de Tyler Johnson tras una magnífica y veloz jugada.

La cosa pintaba mal para los Penguins, que buscaron con la entrada de Marc Andre Fleury en portería la reacción que les permitiese mantener opciones en el partido. El movimiento dió resultado y nada más comenzar el último periodo, Phil Kessel abría la lata para los pensilvanos. A Tampa le sobraba mucho tiempo para tratar de frenar las intensas acometidas de Pittsburgh, que pese a lograr reducir la ventaja a tan sólo un gol con los tantos de Evgeni Malkin y Chris Kunitz, no conseguiria el empate para forzar la prórroga y la victoria se quedaba en casa.