Juan Martín Díaz y Fernando Belasteguín pueden decir ya casi con total seguridad que acabarán su relación deportiva como números 1 tras vencer en una nueva final a Juani Mieres y Pablo Lima (6-4, 1-6 y 6-2) en el Estrella Damm Tenerife Open.
Fernando Belasteguín definió al término del partido como una final "rara" la que se ha vivido hoy en Tenerife. Debe ser el mejor calificativo para una final que comenzó con más de una hora de retraso por una fuerte tormenta en Tenerife y que provocó que World Padel Tour decidiera que el ganador lo haría al mejor de tres sets, como no hace mucho se hacía.
También rara porque no fue lo igualada que se podría prever: la anterior, en La Nucía, se la llevaron los Príncipes, pero los Reyes venían enrachados después de ganar los dos últimos campeonatos. El juego psicológico fue más importante que el técnico ya que un error en una final de tres sets se paga mucho más caro.
Sabedores del peligro, los cuatro comenzaron a un gran ritmo y los dos primeros juegos se sucedieron en blanco. Después de mantener sus servicios hasta el 2-2, llegó la primera rotura del partido, su consolidación posterior, y una nueva rotura para Fernando Belasteguín y Juan Martín Díaz. El 5-2 en el primer set con saque para Bela no fue suficiente porque los Príncipes detestan perder. Se rehicieron y pelearon hasta lograr meter miedo con un 5-4, pero Juan Martín Díaz no cedió su saque y con un remate cerró el primer set para los números 1 (6-4).
Empieza la montaña rusa
Hasta aquí puede parecer normal: una final y un break es el que marca la diferencia en el primer set. Pero a la vuelta Pablo Lima y Juani Mieres se lo tomaron como algo personal y fueron a empatar el partido desde el primer momento. Tanto fue así que se plantaron 5-0 en el marcador y si no es por un último saque de Juan Martín Díaz podrían haberse llevado el rosco. El juego agresivo de los número 2 no encontraba oposición en los Reyes así que todo se decidiría en el tercer y último set.
Y por último "rara" porque, cuando parecía que eran Lima-Mieres quienes tenían comida la moral a Bela-Díaz, se produjo el efecto contrario en el tercer set. Pronto se pusieron 3-0 tras romper un break y consolidar, aunque Lima consiguió ganar su saque después de haber sido atendido por el fisioterapeuta. Fue un intento de acercarse que no tuvo continuidad porque Juan y Bela siguieron a lo suyo y se pusieron 5-1. El partido ya estaba visto para sentencia aunque no fuera a la primera, sino a la segunda cuando certificaron la victoria.