La existencia de Irlanda en el VI Naciones 2016 ha sido un camino desilusionante. Lo que había comenzado como el asalto a un histórico tercer triunfo consecutivo se convirtió, casi desde la primera jornada, en una sucesión de irregularidades.

Frente a Italia, el combinado dirigido por Josef Joe Schmidt maquilló el honor perdido en la derrota frente a Inglaterra en la tercera jornada (21-10), que le privaba de cualquier opción de triunfo final.

Italia estuvo lejos de la versión que consiguió poner contra las cuerdas a Francia en la jornada inaugural. La derrota ante Escocia en la jornada precedente hirió de muerte a los azzuri, que habían perdido el duelo clave para evitar llevarse la cuchara de madera, que recibe el colista del Seis Naciones. Irlanda fue una apisonadora que tardó en arrancar en la primera fase, en la que el aplomo físico italiano sostuvo sus aspiraciones iniciales.

Solo falló Sexton

Los transalpinos lograron anotar un ensayo que no subió al marcador al estar pisando la línea de banda Gonzalo García en el momento de posar el oval. Sí dio en la tecla correcta Andrew Trimble, quien hizo subir los seis primeros puntos en el marcador que supusieron el preludio de una feroz victoria.

El ensayo inicial llegó tras un error de Leonardo Sarto. Las faltas de entendimiento en la defensa italiana allanaron la senda para una Irlanda que consiguió su segundo try al cuarto de hora por medio de McGrath tras una touch.

El sudafricano CJ Stander anotó su primer ensayo como jugador de Irlanda

A la media hora de juego, el resultado se había convertido en un 20-3 de difícil asunción para el combinado dirigido por Jacques Brunel. Tan sólo un golpe de Padovani había conseguido amainar un temporal insalvable. El tercer ensayo irlandés tuvo un sabor especial. El jugador de origen sudafricano CJ Stander, que incluso llegó a jugar en las categorías inferiores de la selección de los Springboks, transformó su primer ensayo como integrante del XV del Trébol.

El flanker también participó en el cuarto sirviendo en bandeja el oval a un Hesalip que se aprovechó de la temblorosa defensa italiana. El 25-3 con el que se llegó al descanso tan solo dejó para la segunda parte en el aire cuál sería el margen del triunfo local. El tanteo pudo ser más amplio de no ser por la mala sombra que persiguió a Jonathan Sexton, quien falló tres de las cuatro conversiones intentadas. Su pierna pareció ortopédica, cuando las estadísticas demuestran que es un seguro de puntos.

El banquillo mantuvo la chispa

Los suplentes irlandeses mantuvieron la tensión y no dejaron que el ritmo decayese. El Aviva Stadium vivió una entretenida segunda parte en la que Italia se desperezó con dos ensayos finales que decoraron un poco su cuenta. Para entonces el XV del Trébol ya había soltado toda artillería.

Dos ensayos permitieron al combinado italiano mejorar su marcador

Nada más reanudarse el partido, Payne, tras robar un pase defecutoso de los azzuri, hizo posible su primer ensayo. El torrente tuvo continuidad por medio de Heaslip y el talonador suplente Sean Cronin, que puso un vertiginoso 46-3 en el marcador que se encargó de aumentar con una transformación Ian Madigan.

Italia exprimió las últimas gotas del tanque de combustible y se fue a por el ensayo del honor. David Odiete hizo bueno el esfuerzo. Respondió a este pequeño retumbe Madigan. El intercambio de golpes se completó con otro ensayo italiano de Sarto y el cierre de función de McFadden para los irlandeses, que pusieron el definitivo 58-15. Un partido sin historia y de orgullos heridos que deja todo (prácticamente) igual.

VAVEL Logo
Sobre el autor
Denís Iglesias
Liga BBVA, Segunda B, LNFS y fútbol internacional. Dispuesto a todo. [email protected]