Rafael Nadal Parera es un elegido del tenis. Además es un deportista excepcional, de los que se cuentan con los dedos de una mano. Tras garantizar el primer puesto de su grupo al imponerse en la primera manga ante Tomas Berdych, el balear podía haberse tomado el partido con mayor tranquilidad, pensando en la dura jornada del domingo. A todo esto hay que sumar un segundo set perfecto del checo, que borró a Nadal de la pista endosándole un 6-1 de forma clara y contundente. Pero poco se conoce a Rafa Nadal si en ese momento alguien pensó que podría dejar ir.

Nadal ganó, como lo hacen los grandes, en un gran partido en el que demostró que puede toser a cualquiera que se le ponga por delante en estas pistas. Sobrevivió a Berdych durante un tramo del partido y acabó enterrándole en un gran set final. Pendiente de todo estaba Wawrinka, que tras ganar a Ferrer esta mañana, necesitaba de la derrota de Berdych para poder se rjugador de semifinales. Rafa arrancó como un ciclón, rompiendo el primer servicio de su rival en el juego inicial y solventando cada uno de sus servicios con soltura. Jugando como el mejor Nadal, mandando con la derecha, con bolas largas y eficaz en las pelotas a media pista.

Con el primer set en el bolsillo, y por tanto, el primer puesto de grupo conquistado, el manacorí se relajó en exceso al inicio del segundo parcial. En poco más de un cuarto de hora, el marcador reflejaba un contundente 5-0 en favor de Tomas Berdych, que pudo cerrar sin mayores sobresaltos el set por seis jugegos a uno y, de esta forma, se quedaba a nada de clasificarse para las semifinales. Pero tenía por delante a un Nadal herido en su orgullo debido al repaso recibido en el segundo set. Y entre eso y los nervios por lo que tenía en juego el checo iba a terminar flaqueando.

El último parcial fue excepcional. Y lo fue hasta el final. Nadal nunca bajó la intensidad, al contrario, regresó a la pista con más fuerza que nunca y solamente el servicio mantenía con vida a un Berdych que dispuso de un 15-30 con tres iguales en el marcador. Fue ahí cuando apareció el mejor Rafa para apuntarse ese juego y los dos siguientes, dando un paso hacia delante y matando a Berdych desde la profundidad de todos sus golpes y un juego agresivo que apenas se le había visto con cuentagotas en este tramo final de la temporada.

Por otra parte, justo antes de que Nadal y Berdych saltaran a la pista, los españoles David Marrero y Fernando Verdasco, ya clasificados, cedieron por 6-3 y 7-5 ante Peya y Soares, lo que propició la eliminación de sus compatriotas Marcel Granollers y Marc López.

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