Llegó la primera gran sorpresa del torneo, una de las que nadie esperaba. Las dudas físicas de Nishikori hacían preveer más sufrimiento para pasar su primera ronda en París, que la propia oposición de Martin Klizan, pero el eslovaco se disfrazó del Nishikori de Barcelona y Madrid para apearle de este Grand Slam donde tantas miras tenías puestas encima. Un absoluto recital de la raqueta el de Klizan con el que destrozó al nipón, quien solo pudo sostenerle mínimamente en un apretado primer set que se decidió en el tiebreak. ​

El duelo daba inicio haciendo preveer lo que sería el resto del 'match'. Nishikori dubitativo, Klizan brillante e imponente y ya se ponía por delante quebrando el saque a su rival a las primeras de cambio. Este no sería el primero de sus golpes mortales a las opciones de Nishikori, ya que el japonés supo reponerse e incluso se llegó a colocar con servicio para cerrar la primera manga. Entonces, Klizan aceleró el ritmo de su tenis hasta límites insospechados y Kei pudo llegar a apurar hasta un tiebreak donde ya no pudo escapar del festival esloveno.

Tras el tiebreak, Klizan no tuvo rival

Con su mano zurda a diestro y siniestro, de revés inverosímiles, dejadas inalcanzables, servicios inapelables y con mucha fortuna, demasiada pero no para explicar su impresionante victoria solo debido a temas de azar. Klizan había despertado la bestia que llevaba dentro, una bestia que asustó al hasta entonces 'invencible guerrero nipón'. Ni Ferrer, ni Nadal, ni nadie había avasallado de esta manera a Nishikori en esta temporada de tierra batida. Klizan, lo aplastó.

El segundo set fue de manual para el eslovaco. Variando perfectamente en su tenis, el mermado japonés se veía incapaz de frenarle tanto en lo tenístico como en lo mental. Todas las facetas posibles del juego se las tenía ganadas, y el marcador aún más. Tanto fue así que cerca estuvo de endosarle un doloroso 'rosco' en la segunda manga, pero in extremis el tenista de Shimane consiguió salvar mínimamente su honor dejando la sangría en un doloroso ya de por sí 6 a 1.

Klizan destruyó por completo el tenis del 'top ten' japonés

Con dos sorprendentes sets favorables a Klizan en el luminoso, se llegó al que sería el set definitivo. Ni el mayor de los ilusos esperaba por entonces la reacción de Nishikori, y es que ni siquiera llegaron atisbos de ella. Ni la bola le corría como siempre debido a lo pesada que estaba la tierra por la lluvia que arreciaba, ni su juego de piernas poseía esa 'electricidad' de semanas anteriores. Quizás su vuelta al ruedo fue demasiado rápida, ya que dio la impresión de que su espalda seguía dando problemas.

Aunque para problemas, los que le dio Klizan. El eslovaco le ponía obstáculo insuperables en cada paso que intentaba dar el nipón. Además, su aciago día al servicio se acrecentó, finalizando el partido con la friolera cifra de 10 dobles faltas. Con todo, parecía imposible que Nishikori pudiera ganar ya no un par de juegos seguidos, sino encadenar varios puntos. De esta manera, Klizan aprovechó para sellar esta victoria por 6 juegos a 2, en el que seguramente fue el partido de su vida, por el rival, por el escenario y por su estratosférico nivel mostrado.