Tan nulos en los intercambios y al resto, como potentes y efectivos al servicio. Así se mostraron ambos tenistas en este partido de octavos de final en el ATP de Queens. Una batalla donde solo los saques lucieron, que se llevó X en tres apretadas mangas que, cómo no, tuvieron que ser decididas en tiebreaks, donde se mostró más acertado que su oponente.

Un primer set sin historia para el toledano

Desde el inicio del partido se vio lo que ambas raquetas nos ofrecerían. Feliciano, a su nivel habitual en hierba, imponente al saque, seguro y decidido y sabiendo a la perfección cuales son sus carencias, pero también sus armas. Enfrente, el francés De Schepper, que no parecía el mismo que el día antes había conseguido derrotar al fatigado Ernests Gulbis. Una victoria que, visto lo visto hoy, se antoja cuanto menos inverosímil.

No hubo bolas de break en la primera manga

Los saques se sucedían, y nadie era capaz de dañar a su rival al resto. Los bolas caían al otro lado de la red sin obtener respuesta, tanto con el español al saque, como con el galo. Así, el final no podía ser otro que el tiebreak. Allí el español se mostró más eficaz, y dos errores en la red de De Schepper le condenaron a perder la primera manga con un tanteador de 7-6 (7-2) en la muerte súbita.

Mismo guión, distinto final

La segunda manga continuaba por los mismos derroteros que la anterior. Saques inquebratables, servicios rápidos y partido muy descafeinado en lo técnico. Nadie se atrevía a nada más allá de lo normal, y el que lo hacía erraba. Solo una pequeña variante, e importante a su vez: Feliciano dispuso de una bola de break que, a su vez, era de partido con 5-4, pero no la pudo hacer efectiva.

Con ese guión previsto, el final tenía pinta de ser el mismo, con un tiebreak, y así fue. Solo hubo una pequeña diferencia esta vez, el final. Ahora el galo iba a ser el protagonista de esta nueva muerte súbita (4-7), la fortuna estuvo de su parte y llevó el partido al tercer y definitivo set.

Al set definitivo se llegaba con unos números bien marcados: 28 saques directos en total -18 del francés, por 10 del español-, tan solo una bola de break y un porcentaje de apenas el 21% de puntos ganados al resto en ambos. Un panorama desolador para el amante del buen tenis.

En el tercer y último set, los nervios del francés empezaron a florecer. Al otro lado de la pista, Feli decidio romper con lo hasta entonces estipulado, poniendo al límite al francés en varios saques que no pudo llegar a hacer suyos. De Schepper conseguía subsistir en la hierba gracias a sus potentes servicios, los que consiguieron llevarle a la muerte súbita. Con las espadas en todo lo alto, Feli volvió a ser más resolutivo que su rival, volviendo a desplegar un tenis de nivel en el momento más oportuno -como en la primera manga- y avanza a la siguiente ronda, donde se las verá con el checo Tomas Berdych.