Parece un tópico, y algo carente de racionalidad el considerar el apoyo del público un factor importante en el rendimiento de un jugador. Sin embargo, Peter Polansky pone de manifiesto que cuando juega en casa, en Canadá, su tenis mejora de manera potencial, y es capaz de dar un susto a cualquiera. Siempre con Wild Card, este espigado jugador nacido en Ontario ha protagonizado buenos encuentros en este torneo, venciendo a Jurgen Melzer en la edición de 2010. En esta ocasión, fue Jerzy Janowicz qiuen sufrió el crecimiento como jugador de Polansky ante su público.

Janowicz y Hewitt decepcionan

Un errático Janowicz cometió 10 dobles faltas

Tras una jornada gris, con muchas interrupciones por lluvia, Polansky aportó luz a un público algo apático durante toda la jornada. Cediendo una sola vez su saque ante un Janowicz que no pareció estar en el partido en ningún momento, tal y como atestiguan sus 10 dobles faltas, el canadiense se mantuvo firme en todo momento para alzarse con la victoria, siendo el tiebreak del primer parcial clave en el devenir del encuentro. El resultado final fue de 7-6 (5) y 6-4. El polaco se despide así de un torneo en el cual brilló en 2013, siendo eliminado en octavos por Rafael Nadal en uno de los mejores encuentros de la pasada edición. Polansky se enfrentará a Roger Federer en la jornada del martes, en lo que supondrá un sueño hecho realidad para este humilde jugador.

Aunque la gran decepción del día la protagonizó Lleyton Hewitt. Idolatrado y apoyado en casi todos los torneos por la actitud que demuestra en cada partido, ayer el aussie tuvo uno de esos días en los que no sale nada. Su regreso a un Masters 1000 no pudo ser peor, cayendo con estrépito ante un Benneteau que solo tuvo que aprovechar los errores del australiano. Los parones por lluvia no ayudaron nada a que Hewitt cogiera ritmo, y las ocho dobles faltas realizadas por el australiano ponen de manifiesto lo errático que estuvo durante todo el encuentro. 6-1 y 6-2 para el francés de 32 años, que espera rival entre Gulbis y Sousa.

Tsonga y Cilic cumplen con los pronósticos

Tsonga y Cilic, esos jugadores que se mantienen en la sombra de las grandes figuras pero que tienen el potencial suficiente para dar un disgusto a cualquiera, solventaron sus encuentros no sin ciertas dudas, sobre todo en el caso del croata. Cilic pareció algo incómodo sobre la pista, quizá porque hace tan solo una semana estaba jugando sobre tierra batida. Istomin lo aprovechó para arrancarle un set, y llevarle al límite en el tercer parcial, donde el croata hizo valer sus galones para romper el servicio del uzbeko con 6-5 en el marcador.  El resultado final fue de 6-2, 4-6 y 7-5. Por su parte, Tsonga estuvo algo inseguro en el primer set, pero tras hacerse con él en la muerte súbita, todo fue más sencillo para el de Le Mans, que se enfrentará a su compatriota Chardy en la siguiente fase. El resultado final de su encuentro ante Roger-Vasselin fue de 7-6 (3) 6-1.