Hablar de Nick Kyrgios como una sorpresa ya es agua pasada. El joven tenista oceánico, en base a su excelente rendimiento tenístico, brutal despliegue físico y sorprendente respuesta en grandes citas, se ha ganado el derecho al reconocimiento de sus méritos. Tras alcanzar unos extraordinariamente exitosos cuartos de final en Wimbledon, Kyrgios continúa caminando la misma senda en el último Grand Slam de la temporada, el US Open, en el cual esta madrugada obtuvo su billete a la tercera ronda.
Tras dar la entrecomillada campanada en primera ronda ante el vigésimo primer cabeza de serie, el ruso Mikhail Youzhny, otro rival de contrastada entidad se asomaba en el horizonte del todavía adolescente deportista australiano: el italiano Andreas Seppi. El tenista transalpino, quien el pasado año alcanzase la 18ª posición en el ranking ATP, ocupa en estos momentos el puesto 49º del mismo, atravesando un mal momento de juego y de resultados.
Robredo será su rival en tercera ronda
Seppi cayó en las redes de Kyrgios desde el primer instante del partido. Jugando sus bazas de forma brillante y calculadora, el australiano se lució con su servicio, conectando un 65% de primeros servicios y sin conceder ninguna rotura en todo el encuentro. Partiendo de esta premisa, dos breaks y un desempate en el segundo parcial bastaron al más joven de los contendientes para barrer a su rival por un impecable 6-4, 7-6 y 6-4.
En tercera ronda, Nick Kyrgios deberá verse las caras con el gerundense Tommy Robredo, decimosexto favorito, en un intento por acceder a las rondas finales de un nuevo Grand Slam y, como consecuencia, seguir creciendo como tenista. Flushing Meadows será testigo de un duelo de estilos, contraponiéndose la potencia desmedida del australiano con la clase delicada del jugador español.
Los cabezas de serie cumplen su cometido
La jornada de este jueves se completó con la victoria de la mayor parte de los cabezas de serie que en ella disputaron sus encuentros de segunda ronda, quedando así exenta de grandes sorpresas y giros inesperados que alterasen el guión previamente establecido para ella.
El canadiense Milos Raonic, cabeza de serie número cinco del torneo, sufrió más de la cuenta para imponerse al tenista alemán Peter Gojowczyk, cediendo incluso un set y viéndose obligado a llevar dos mangas al tie-break. Raonic no se halló cómodo en ningún momento en el Armstrong Stadium, viendo como el germano hacía peligrar su opción de cumplir los pronósticos.
A pesar de ello, el marcador final (7-6, 5-7, 6-4 y 7-6) indicaba que el favorito avanzaba a tercera ronda. En ella, Raonic se enfrentará al dominicano Víctor Estrella Burgos, quien se deshizo del croata Borna Coric, verdugo en primera ronda del 29º cabeza de serie Lukas Rosol.
Otro favorito que no erró en su cometido fue el francés Jo-Wilfried Tsonga, reciente campeón del Masters 1000 de Toronto. El tenista galo, nacido en Le Mans, arrasó sobre la pista al kazajo Aleksandr Nedovyesov, con un marcador final de 6-3, 6-4 y 6-4 que refleja con transparencia lo acontecido. En su siguiente parada, Tsonga se verá las caras con la joven promesa española Pablo Carreño, quien derrotó a otro francés, Benoit Paire, en la noche de este jueves.
John Isner, Philipp Kohlschreiber y Leonardo Mayer, cabezas de serie restantes en esta cuarta jornada del US Open, también lograron sus respectivas victorias con relativa comodidad, tras vencer, respectivamente, a Jan-Lennard Struff, Michael Llodra y Matthew Ebden, y estarán, todos ellos, presentes en la tercera ronda del torneo.