La primera semifinal del último Premier Mandatory del curso deparó una larga contienda entre dos tenistas campeonas de Grand Slam. Kvitova; ante la australiana Stosur -no disputó su partido de cuartos por la retirada de Serena Williams-, tomó las riendas del encuentro en el último momento para acceder a una nueva final una semana después de que lo hiciera en Wuhan ante Bouchard. Stosur hizo un buen partido pero cuando parecía tener todo bajo control, se 'desconectó' de la pugna.

Ya el primer parcial avisaba de lo que acontecería. Cuatro breaks en los cinco primeros juegos del partido evidenciaban un choque con alternativas. Al 2-3 Kvitova forzó a Stosur a salvar los primeros claros envites que incitaban a la checa a ponerse por delante. La australiana tuvo que emplearse a fondo -el juego tuvo 18 puntos y duró más de 10 minutos- para solventar la situación comprometida a la que la de Bilovec la instaba. Sin embargo, tras igualar (3-3) el cansancio de un juego mentalmente y físicamente agotador le acabó pasando factura a la número 21 del ranking WTA, que vio como su oponente ponía la directa adjudicándose los tres siguientes juegos de manera consecutiva y plasmando sobre el luminoso el primer set de su lado (6-3).

La lluva obligó a aplazar el encuentro durante media hora

Una vez ratificada la primera manga, la lluvia hizo acto de aparición sobre el National Tennis Center de Pekín y se necesitó media hora para techar la Central del recinto. A la reanudación, pudo verse una mejor versión de la australiana dispuesta a prestar guerra. Al 2-3 Kvitova sorprendía pidiendo un 'Medical Time Out' (parón por asistencia médica) que obligaba a entrar en cancha al especialista para tomarle la tensión. No obstante, no se necesitaron tomar medidas mayores. La pugna elevó el tono y Stosur le plantó cara seriamente a la número 3 mundial. Con 6-5 las dudas aparecieron en la raqueta oceánica pero consiguió finalmente cerrar el parcial devolviendo las tablas al marcador. (5-7)

La consecución del segundo acto le devolvió las alas a Stosur quien arrancó el set definitivo mucho más enchufada de inicio que Kvitova. Sin embargo, al 2-2 la tenista de Brisbane perdió todo el ritmo logrado. Empezó a estar más errática y obligó a Kvitova -que hizo una buena lectura de la situación- a tomar las riendas de un compromiso que tras el quinto juego del último set, sólo tuvo un nombre: el suyo. Con un tanteo final de 6-3 5-7 6-2 la checa se clasificó para una nueva final; la cuarta del año y la primera en Pekín.

Sharapova no levanta el pie del acelerador

Y en ese viaje hacia el que sería su 15° título, le acompañará la rusa Maria Sharapova que se tomó la revancha del duelo de semifinales que perdiera hace unos meses en Cincinnati, ante la serbia Ana Ivanovic. El choque con Kvitova en la antesala de la gloria tendrá el aliciente de que la que consiga imponerse, escalará al segundo puesto del ranking WTA desbancando de esa plaza a la rumana Simona Halep. 

En 32 minutos Sharapova ya había ganado el primer set en blanco

Sharapova fue un auténtico 'ciclón' durante la primera media hora de su partido ante Ivanovic. Con un contudente 6-0 dejó atónito al público chino y noqueada la número 9 mundial que fue incapaz de prestar guerra en el primer parcial. Con la rusa como clara dominadora arrancaba un segundo set en el que la situación cambió completamente. Ivanovic comenzó a asentarse en el fondo de pista y a dominar los intercambios desde esa posición con mucha más agresividad. Eso le permitió mover a 'Masha' de lado a lado y el choque tomó nuevo color. Se pudo ver un auténtico espectáculo tenístico entre dos de las clasificadas para las Finales WTA de Singapur que sin embargo, supo parar la moscovita. Reponiéndose a un juego adverso cuando se disponía a cerrar, finiquitó su pase (6-0 6-4) a la que será su 55ª final elvando a 9 las victorias en este curso frente a tenistas del top ten.