El número 5 del mundo jugó un encuentro de menos a más para reencontrarse con una victoria tras un mes de sequía, cayendo en primera ronda de Shenzen y Tokyo. La última vez que alzó los brazos fue en segunda ronda del abierto de los Estados Unidos por la retirada del australiano Bernard Tomic.

El partido fue disputado. El español comenzó con muchas ganas queriendo demostrar la gran valía que tiene cuando salta a las canchas de tenis, pero esa ansiosa aceleración le iba perjudicar. Sin embargo, Klizan comenzó con errores no forzados y sufriendo en sus primeros turnos de servicio dando la oportunidad a David de tener las dos primeras bolas de break del encuentro, pero el cabeza de serie número 5 las desaprovechó realizando dos errores no forzados y Martin puso las tablas en el marcador empatando a 2. Más adelante, la ansiedad de la que hablábamos salió a escena ya que Ferru realizó un juego espantoso, jugando con segundos servicios y perdiendo mucha pelota regalando así un juego vital para el set. Klizan se colocó 4-3. Ese break fue el único que se vivió durante el set, pero Ferru, aún sin estar jugando bien, no se rindió y puso en apuros al eslovaco en su último turno de saque que le daba la opción de ganar el parcial por 6-4. Tras una dura lucha lo consiguió.

David Ferrer no conseguía realizar su tenis. Planteaba bien los puntos, pero en la hora de la definición era cuando fallaba. En el segundo set tardaron más tiempo en tantearse el servicio. El primero que consiguió la rotura fue el número 5 del mundo colocándose con 4-2, en un juego que Martin había bajado mucho su intensidad al saque, pero estaba claro que la suerte no estaba con Ferrer ya que con un 40-0 a favor, Klizan logró el contrabreak gracias a otro nefasto juego del español donde aparecieron una vez más los errores no forzados con dos doble faltas. El eslovaco sabía donde encontrar las cosquillas a su rival y una vez más le puso en un duro compromiso teniendo que afrontar bolas de rotura, esta vez no las pudo salvar y fue el momento más agoviante del español ya que estaba 6-5 y con break abajo, pero las dudas de Martin aparecieron por primera vez en el partido. Ferrer lo vio y comenzó a jugar más conservador para que fuera Klizan el que tirara el golpe definitivo. Logró una rotura vital para el proseguir del encuentro ya que en el tiebreak vimos al mejor Ferrer del día llevándose con él el set y poniendo las tablas a un encuentro que lo tenía practicamente perdido.

El eslovaco, sabía que su rival se había inyectado autoestima tras remontar el segundo set y se valió de una pequeña herida en su talón izquierdo para llamar al fisio, bajando así la buena racha y el ritmo impuesto por Ferrer. El parón le vinó bien a Martin ya que en el siguiente juego tuvo un 0-40 a favor, pero Ferru pudo remontar y hasta salvar otra bola de rotura más empatando a 1 en el definitivo tercer set. 

Poco a poco el verdugo de Rafa Nadal en Pekin estaba mostrando un déficit en su juego. No conseguía la misma movilidad que al principio ya que el partido estaba siendo duro y las piernas no respondían igual. Por eso tuvo que cambiar su forma de juego teniendo que jugarse los tiros tras dos o tres golpes de intercambio. Sin embargo, el tenista de Javea venía de menos a más y eso le dio una gran oportunidad para gozar de unas bolas de break, que fueron las definitivas ya que sacaba con 5-4. Logró definir el encuentro con su saque, llevándose así una victoria muy importante para su estado anímico. Sin haber jugado su mejor tenis, la mejor tarea realizada por David fue el no irse del encuentro en ninguna ocasión.

El rival de Ferru en octavos de final, saldrá del encuentro que disputan Andy Murray y Jerzy Janowicz.

Roberto Bautista también avanza hasta octavos de final

El tenista español, consiguió derrotar al canadiense Vasek Pospisil por 7-6(1), 3-6 y 6-4 en un encuentro muy disputado. En los momentos importantes el top20 supo estar dentro del partido llevándose así un match que le da el pase a unos octavos de final inéditos para su persona. En siguiente ronda se enfrentará al maestro suizo Roger Federer o al coloso argentino Leonardo Mayer.