El premio a 11 meses de viajes, entrenamientos y duros partidos es lo que buscan con ahínco Andy Murray y David Ferrer. A falta de tan solo tres semanas para el final de la temporada, ambos han decidido competir en tres torneos. Además del ATP 500 de Valencia y el Master 1000 de París-Bercy, el torneo de Viena se convertirá en juez del futuro inmediato del escocés y el español.

Ferrer y Murray; mucho que perder y poco que ganar

Ferrer y Murray ocupan la novena y décima posición en la Carrera de Campeones, a día de hoy. Entre ambos solo distan 60 puntos. La clasificación se decidirá por muy poco margen, y aunque es posible que Nadal o Nishikori causen baja por lesión en Londres, es preferible afanarse por entrar entre los 8 mejores del ránking. Con el objetivo de sumar puntos que a la postre podrían ser decisivos, Ferrer y Murray acuden a Viena. 

Feliciano López y Kohlschreiber, principales alternativas

En un cuadro de 32 jugadores y exentos de la 1ª ronda, Ferrer y Murray deben ganar cuatro partidos para hacerse con el torneo y, por ende, con 250 valiosos puntos. Pero no estarán solos en la batalla. Feliciano López intentará dar continuidad a su gran juego en Shangai, y se reencontrará con el torneo que inauguró su palmarés allá por 2004, en una memorable final ante Guillermo Cañas. Kohlschreiber, especialista en pistas indoor, también será de la partida, y se cruzaría en unas hipotéticas semifinales con David Ferrer.

Karlovic, Rosol, Pospisil o el joven Thiem, se postulan como alternativas a los grandes favoritos, al estar más que capacitados para "hacer saltar la banca" si tienen un día inspirado. Incluso el local y ya veterano Jurgen Melzer, podría resurgir su mejor tenis al amparo de sus compatriotas, y si fuera así, se convertiría en un rival muy peligroso.

Un torneo con mucha historia

El torneo de Viena se disputa desde 1974, siendo uno de eventos tenísticos con más solera del circuito. Ilustres jugadores se han proclamado campeones en la capital austriaca, tales como Lendl (1981), Stich (1991), Agassi (1994), Becker (1996), Henman (2000), Tsonga (2011), Del Potro (2002), o incluso Djokovic (2007) y Federer (2002 y 2003). El vigente campeón, Tommy Haas, no podrá revalidar su título, al estar recuperándose de una lesión.

Los alicientes son muchos; se espera un torneo breve pero muy intenso, en el que si Murray o Ferrer no cumplen llegando a la final, pueden dar un paso atrás importante en sus aspiraciones por acudir al O2 Arena en el mes de Noviembre.