El combinado galo juega en casa -Stade Pierre Mauroy, Lille-, pero enfrente tendrán al equipo suizo capitaneado por Severin Luthi, que parte como ligero favorito. El combinado centroeuropeo cuenta en sus filas con dos de los cuatro mejores tenistas del momento, el vigente campeón del Open de Australia, Stanislas Wawrinka, y el jefe del equipo, el eterno Roger Federer -que busca conquistar uno de los pocos títulos que se le resisten-.
Historia
Para los franceses, esta situación no es nueva, ya que han disputado 16 finales, levantando la ensaladera en nueve ocasiones. La última victoria, en 2001, guarda muchas similitudes con la actual final, ya que el equipo australiano llegaba a esa eliminatoria con el papel de favorito -contaban con dos de los mejores jugadores del momento, Hewitt y Rafter. Al igual que en este 2014, el equipo galo cuenta con cuatro hombres de gran polivalencia y calidad sin ser ninguno un número 1. Tsonga, Monfils, Gasquet y Benneteau quieren revivir el éxito de Escudé, Grosjean, Santoro y Pioline.
El combinado francés, de la mano de su entrenador, Arnaurd Clement, vuelve a una final cuatro años después. De aquella edición solo repiten Monfils y Simon, que será suplente. Con Tsonga como principal baza, y la pareja Gasquet-Benneteau, Francia se convierte en un equipo muy sólido en todos su puntos. Todos ellos se encuentran entre los 30 mejores del mundo.
Jo-Wilfried Tsonga: motivado con el reto
A pesar de haber salido del topten tras cuatro años, Tsonga encara esta final con el bonito reto de encabezar a su país hacia la gloria definitiva. Sobre la tierra batida donde se disputa la final, los partidos individuales ante Wawrinka y Federer se intuyen decisivos para las oportunidades del combinado galo. La igualdad en esta superficie es patente entre estos jugadores, con lo cual será una incógnita quién dará los puntos a sus combinados.
Tsonga: "La Copa Davis me ha llevado a jugar al tenis. Lo pude ver en la televisión. Para mí, el tenis es la Copa Davis”
Su temporada se puede catalogar como irregular, intercambiando torneos decepcionantes con grandes logros como el Masters 1000 Toronto -alcanzó su máximo nivel derrotando a tenistas de entidad como Djokovic o Federer-. La Copa Davis en esta temporada ha llenado el vacío de no disputar rondas finales durante el año. Tanto en las eliminatorias ante Australia y la República Checa, fue el héroe del equipo sacando adelante dos puntos y llevando a su país en volandas hacia la final. Tsonga se muestra muy ilusionado de cara a la eliminatoria. "Todos tenemos diferentes expectativas. Por mi parte, es un sueño de infancia. La Copa Davis me ha llevado a jugar al tenis. Lo pude ver en la televisión. Para mí, el tenis es la Copa Davis", declaró el francés a L'Equipe.
Monfils: el carácter
Monfils ha vuelto en este 2014 tras el calvario de lesiones que ha vivido en estos últimos años. Ha terminado la temporada en el top25 tras conquistar un nuevo título en Montpellier a principios de año. Esta temporada, Gael ha vuelto a codearse con los grandes y vuelve a pelear con ellos por estar en las últimas rondas. La lesión de rodilla es historia y quiere ratificar un gran año con el título por países.
Sobre tierra batida, Monfils es un seguro y puede ser la clave de la final. Ya ha sido esta temporada pieza importante en el equipo consiguiendo el punto decisivo en la eliminatoria ante Alemania. Sus enfrentamientos con Federer son sinónimo de igualdad, épica y espectáculo, por lo que su papel en el combinado puede ser importante.
Gasquet y Benneteau: 'El mago' y la polivalencia
Gasquet ha finalizado un 2014 muy discreto debido a las expectativas puestas sobre él tras acabar en el topten las dos últimas temporadas. Los problemas físicos, la falta de confianza y la ausencia de Ricardo Piatti en el banquillo, han sido una losa muy grande para Richard. En esta final tiene la oportunidad de devolverle al público francés todo la esperanza que han depositado sobre él durante esta última decada como líder de esta generación.
Gasquet deberá superar la presión que sufre cuando juega ante su público y ya sea en individual o en el doble, deberá poner su magia y su excelso revés a una mano a disposición del capitán Clement, que ha confiado en él por delante de jugadores en gran forma como Simon.
Benneteau ha sido el último en incorporarse al equipo ya que en la primera convocatoria se encontraba fuera del combinado en detrimento de Simon. El entrenador galo cambió a última hora de opinión creyendo que es la decisión correcta, aunque Simon llegue a este final de temporada en gran forma física y de resultados. Julien llega tras haber disputado la Copa de Maestros en la modalidad de dobles junto con su compatriota Roger-Vasselin, donde alcanzaron las semifinales. Benneteau es un gran especialista en dobles en el que ha conquistado Roland Garros o la medalla de bronce en los juegos olímpicos de Londres junto con Richard Gasquet.
La Armada Francesa siempre se ha caracterizado por sus equipos compactos, donde hay un gran número de tenistas que pueden jugar el individual como el doble, y buscarán dejar la Copa en Lille. Llegan sin hacer ruido, pero con la intención de amargar el final de temporada a Federer y a Wawrinka.