Partido trampa el que afrontaba el serbio a pesar de llegar con un 'head to head' favorable por 3-0. Pero en frente se encontraba uno de esos jugadores especiales del circuito: Alexandr Dolgopolov, que venía de imponerse al español Tommy Robredo. Una auténtica caja de sorpresas, capaz de lo mejor y de lo peor. Como si del Doctor Jekyll y Mr. Hide se tratara, la brillantez y osadía que le valieron la ucraniano para poner contra las cuerdas al campeón, se transformaron en precipitación y condescendencia que hicieron resurgir a Novak Djokovic. Y sin desplegar su mejor tenis, la insurrección anárquica de Dolgopolov se quedó en intento. El rey superaba una importante prueba de fuego y acto de fe para colarse en cuartos de final del Masters 1000 de Miami. 7-6 (3), 5-7 y 0-6, Djokovic conseguía solventar la eliminatoria. 

Dolgopolov vs. Djokovic: Anarquía contra hegemonía

Dispuesto a dar la campanada, Dolgopolov salió muy agresivo, con una estrategia bien definida: dominar los puntos y terminarlos de la forma más rápida posible. A sabiendas de que los peloteos caerían del lado del balcánico, el ucraniano jugaba la baza del todo o nada. Pero en frente, Novak Djokovic, impedía llevar la teoría a la práctica. 

La intensidad y la igualdad fueron las notas dominantes de los compases inciales del encuentro. Ambos jugadores solventaban sus turnos de saque sin demasiadas dificultades. Hasta el quinto juego. Dolgopolov golpeó primero tras desaprovechar dos oportunidades de 'break', bien salvadas por Djokovic con un punto de saque y un pashing shot. Pero a la tercera fue la vencida. Con la fortuna que le deparó la cinta, la bola del ucraniano superó una temeraria subida del serbio y ponía el 3-2 y saque favorable al número 65 del ranking ATP.

Desde el inicio, Dolgopolov impuso el guión del partido: Djokovic no podía contrarrestar su anarquía Djokovic, enrabietado e impotente, estampaba la bola contra uno de los laterales de la pista. Warning del juez de silla, al serbio no hacían más que crecerle los enanos. El número 1 no se encontraba cómodo siguiendo el guión que dictaminaba Dolgopolov, tan versátil e impredecible como acostumbra. Demostrando una fortaleza mental hasta ahora desocnocida del ucraniano, fue capaz de confirmar la rotura después de levantar de forma magistral dos bolas de 'break'. 4-2 mandaba el natural de Kiev. Saltaba la sorpresa hasta el momento en el Crandon Park de Miami.

Pero Novak Djokovic es mucho Novak Djokovic. El serbio no había dicho su última palabra. Sacó adelante su turno de saque y en blanco, igualaba las tornas rompiendo el servicio de un Dolgopolov precipitado y ansioso por cerrar la primera manga. 4-4, tener el set tan cerca atenazó los nervios del ucraniano. La habilidad para ganar los puntos de inflexión mantenían con vida las aspiraciones del serbio.

La tensión iba en aumento y los puntos se apretaban cada vez más. Y fue Dolgopolov quien volvía a tener oportunidad de cerrar el set. Rompió por segunda vez el servicio de su adversario para desesperación de Djokovic. 5-4 debajo y al resto para tratar de dar la vuelta la resultado, el serbio destrozaba su raqueta contra el suelo de Miami. Segundo warning del juez de silla: penalti point favorable
La frustración de Djokovic era patente: dos warning en la primera manga: uno por lanzar una pelota la lateral, otra por estampar la raquetaa Dolgopolov. El ucraniano se encontraba con 5-4, saque, y 15-0 a favor. Todo de cara para anotarse la primera manga.

Pero el número 1 del mundo volvía a demostrar su condición. Contra viento y marea, con la frialdad que acostumbrar en los momentos clave, Novak Djokovic quebraba el saque de su adversario y ponía el empate a cinco. En blanco confirmaba la rotura y Dolgopolov servía para cerrar el set con 5-4 y 15-0 a favor por un penalti pointse colocaba con 6-5. Dolgopolov, que en su anterior turno sacaba para cerrar el set, ahora lo hacía para no perderlo. Y con toda la presión sobre sus hombros, mandó el set al tie-break.

Con algo de fortuna llegó el primer 'mini-break' para Dolgpolov. Después de coquetear con la cinta, la caprichosa bola superó la red para desesperación de Djokovic, que regaló los siguientes tres puntos en busca de un winner que le devolviese la confianza. 4-0, segundo punto al resto que conseguía el ucraninao, encarrilando el set. Y esta vez Tras conceder el primer 'mini-break', Djokovic registró errores no forzados en los siguientes tres puntos las amenazas tomaron forma. Manteniendo la agresividad y la concentración que habían llevado a poner contra las cuerdas al vigente campeón, Dolgopolov no perdonó cuando tuvo saque para ganar la primera manga. 7-3, el ucraniano se anotaba el tie-break del primer set.

Djokovic resurge ante la condescendencia del rival

El ucraniano tenía su día y no quería que su gran actuación quedase en un mero toque de atención al vigente campeón. Tras comenzar sacando y solventar sin dificultades el turno, Dolgopolov se encontraba con tres oportunidades de 'break' para encarrilar la segunda manga y el partido. Con un tremendo revés paralelo destrozaba el servicio del serbio. Sacando a las mil maravillas, se anotaba el tercer juego del parcial. 3-0, saltaban las alarmas para el número 1 y vigente campeón del torneo.

La mejor versión del serbio apareció para afrontsr los momentos más desesperadosDolgopolov seguía desatado, pero ya no registraba tantos aciertos. Incluso se encontró a un punto de sepultar las opciones del serbio, pero un tremendo winner de éste para levantar bola de 'break' en contra, devolvió la esperanza al número 1. La valentía del ucraniano tornó en timidez cuando estaba por delante para sellar el partido. El cambio de estrategia terminaron por condenar al ucraniano.

Pero Dolgopolov seguía mostrando un gran rendimiento. Volviendo a presionar a su rival, apoyado en un gran servicio, el ucraniano levantó un 0-30 y solventaba un turno de saque muy complicado. Aún mandaba 4-1 en el marcador. Se encontraba a dos pasos de cerrar el partido. Pero el respeto que infundía Novak Djokovic pesó demasiado.

Con 4-1 arriba, Dolgopolov tuvo bola de 'break' para poner el 5-1 y sacar para ganarServía Djokovic para tratar de obrar la remontada. Y sacó adelante su turno de saque a pesar de cometer una doble-falta. Pero Dolgopolov concedió demasiados errores esta vez, oportunidad de 'break' y de poner el 5-1 incluida. El bajón del aspirante estaba dando vida al serbio mientras que las posibilidades de dar la campanada del ucraniano se reducían notablemente, a pesar de seguir liderando el parcial por 4-2.

Y llegó el momento de la resurrección del campeón. Por segunda vez en el partido y primera vez en la manga, Novak Djokovic quebraba el serbicio del ucraniano y consumaba la rotura en el juego posterior. Tres juegos consecutivos empataban el asalta a cuatro juegos. La tempestad había pasado y ahora era él quien azotaba sin piedad a Dolgopolov.

A pesar de sacar adelante su servicio y romper la racha de juegos que encadenaba Novak Djokovic, el ucraniano no fue capaz de cerrar el set cuando solo se encontraba a un paso. Novak Djokovic demostraba que la madera de los grandes campeones se fragua Novak Djokovic se apuntó el set ganando los puntos vitales, no siendo superior a su contrincante ganando los puntos vitales y no desplegando un tenis superior. Con 5-5 volvía a quebrar el servicio del ucraniano y sacaría para igualar la contienda. Y no falló. El partido se decidiría en tercer y definitivo set tras apuntarse por 7-5 el segundo set.

Bandera blanca y paseo militar en el último set

La resignación de no haber cerrado el partido cuando lo tuvo en su mano, unida a los problemas físicos que adolecía Dolgopolov, hicieron del último asalto un tranquilo paseo militar de Novak Djokovic. Quebrando el saque de su rival tras un juego en blanco, confirmando la rotura en el juego posterior, y volviendo a romper el servicio por segunda vez, el partido quedaba sentenciado.

Un duro 3-0 campeaba en el marcador, pero Novak Djokovic quería más. Después de haber ido a remolque todo el partido, después de haber sacado adelante una y varias situaciones críticas, el orgullo del número 1 había quedado en entredicho. El vigente campeón clamaba venganza. Un tercer 'break' tras una doble falta de Dolgopolov, certificaban el fin del partido. 6-0, rosco para sellar la eliminatoria y acabar con las esperanzas de un gran Dolgopolov.

Cerca estuvo Alexandr Dolgopolov de terminar con la hegemonía de Novak Djokovic. La anarquía del ucraniano amenazó el trono del serbio, pero la frialdad y acierto en los momentos críticos, sofocaron la revolución. Susto mayúsculo para el número 1 del mundo que se enfrentará al español David Ferrer por un puesto en las semifinales del Masters 1000 de Miami.