Incomprensible lo ocurrido esta noche en el Foro ItalicoEl "derbi suizo" entre Roger Federer y Wawrinka se presumía como el duelo estelar de la jornada. Sin embargo Wawrinka, con la indolencia por bandera, arruinó el espectáculo.

Arrancaba el encuentro en una Centrale que presentaba unas condiciones indignas de un torneo de semejante categoría, y Wawrinka lo hacía a un nivel elevadísimo, recordando al gran tenista suizo campeón del Open de Australia entre otras hazañas. En los primeros tres juegos, Roger Federer no pudo hacer más que contemplar como Stan se ponía 3-0 arriba a base de "palos y más palos".

Pero el tenis es caprichoso, y hoy quiso que un despiste de Stananimal permitiese a Roger recuperar el break y empatar el partido a 3. Lo que pasó a partir de entonces escapa de los entendible y seguro que dará mucho que hablar. Stan empezó a fallar y fallar, y Roger, inteligentemente, se limitó a poner la bola en juego, lo que fue suficiente para lograr un segundo break y cerrar el parcial por 6-4.

El lado más oscuro de Stan

El segundo set fue una oda al pasotismo por parte de Wawrinka. Stan dió un espectáculo bochornoso, una imagen inadmisible para cualquier jugador profesional. El de Lausana se desentendió del partido e incapaz de meter una bola, fue dejando helado a todos los espectadores, que con gesto impasivo contemplaban como se estaban quedando sin partido. El que no se quedó helado fue Federer, que enrabietado por una bola que Stan feamente le tiró al cuerpo, se puso el disfraz de Dios -ese que tan bien le queda- e impartió su particular clase magistral para cerrar el partido en menos de una hora por 6-4 y 6-2.

Final Soñada

Los organizadores seguró que están agradecidos a Wawrinka por haberles entregado en bandeja de plata la final que todo aficionado quería, con permiso de Rafael Nadal.

El genio suizo se enfrentará ni más ni menos que al número uno del mundo, el serbio Novak Djokovic que busca en Roma el que sería su quinto Masters 1000 consecutivo. Federer, por su parte, espera añadir a su envidiable palmarés uno de los pocos títulos que le faltan.

De lo que no cabe duda es que mañana disfrutaremos de un auténtico espectáculo. Un clásico del tenis que mañana vivirá su 39ª edición. Por el momento 20 victorias para Federer y 18 para Djokovic.