Se acerca una de las fechas señaladas en todos los calendarios de los amantes del tenis, Roland Garros. El histórico torneo está preparado para acoger una nueva edición en sus pistas y Tomas Berdych quiere ser uno de los protagonista en esta edición. El tenista checo entra en el cuadro final como cuarto cabeza de serie y se desmarca como uno de los tenistas a tener en cuenta sobre la arcilla parisina. Berdych está desplegando este año su mejor tenis. Al checo le sentó bien entrar en la treintena y la pasada semana, tras llegar a cuartos de final en el torneo de Roma, alcanzó su máxima posición histórica en el ranking, el cuarto puesto. Roland Garros se ha cruzado en el camino del checo en el mejor momento de su carrera.

En el único Grand Slam disputado este año, el Open de Australia, el tenista checo consiguió alcanzar las semifinales donde cayó contra Murray en un trepidante partido a cuatro sets. Australia fue el despegue de Berdych que, en todos los torneos que ha disputado esta campaña, su peor resultado son los cuartos de final en Roma e Indian Wells. El checo llegó a las semifinales en el Open de Australia, Dubai, Miami y Madrid; y alcanzó la final en Doha, Rotterdam y Monte Carlo. Es cierto que, a pesar de estas tres finales, no ha conseguido ningún título, pero el tenis jugado ha despejado las dudas sobre la irregularidad mostrada años atrás. Este año, el tenista checo, está despuntando por su regularidad, llegando lejos en todos los torneos diputados, y por su gran estado de forma. Su parcial, hasta el momento, es de treinta y dos victorias y nueve derrotas.

Precedentes en el torneo

Viendo el gran estado de forma en el que llega Berdych, vamos a rememorar sus actuaciones sobre las pistas de Roland Garros. El tenista pisó por primera vez las pistas parisinas hace once años, en el 2004. En esta ocasión tuvo una discreta actuación. Su rival, Paradorn Srichaphan, eliminó en primera ronda a Berdych en un partido plácido para el tailandés. Al año siguiente, en el 2005, el checo consiguió avanzar una ronda y cayó eliminado en la segunda,en esta ocasión su verdugo fue David Nalbandian. Berdych iba cogiendo experiencia y escalaba muy rápido en el ranking. En el 2006 sorprendió a propios y extraños alcanzando los dieciseisavos de final donde cedió ante el que por aquel entonces era el maestro del tenis, Roger Federer. Lo del 2006 fue un espejismo y en las siguiente ediciones del torneo tuvo unas más que discretas actuaciones sin conseguir pasar las primeras eliminatorias. Con discretas actuaciones llegó al Roland Garros del 2014. En esta ocasión subió el listón y consiguió llegar hasta cuartos de final donde perdió contra Gulbis sorprendiendo al público parisino. El balance de Berdych en Roland Garros queda en diecisiete victorias y once derrotas.

El gran estado de forma del checo contrasta con las discretas actuaciones del tenista en la arcilla parisina. Es cierto que la superficie favorita de Berdych es la pista dura, pero este año ha llegado lejos en torneos de tierra batida como la semifinal en Madrid y la final en Monte Carlo. El mejor tenista checo del momento, recientemente una de las cuatro mejores raquetas del mundo, llega a las pistas de Roland Garros con ilusión. Quiere demostrar al mundo del tenis que su mejor momento ha llegado, cuando muchos creían que no iba a terminar de explotar, y personalmente desea quitarse esa espina que tiene clavada con sus discretas actuaciones en este Grand Slam que está a punto de comenzar: Roland Garros.