Jack Sock y Grigor Dimitrov medían fuerzas en primera ronda de Roland Garros con el único reto de espantar los fantasmas de su juego y volver a dar una buena versión con la que disfrute con el público. Para el estadounidense era más normal los últimos resultados en escenarios de arcilla, sin embargo, el nivel de tenis de Dimitrov está en mínimos y permitió una victoria cómoda del americano por (7)6-7, 2-6 y 3-6.

El primer set puso la emoción

El primer set mostró a dos tenistas que se centraban en mantener su servicio para evitar que una posible bola de break se convirtiera en una rotura muy difícil de recuperar, sobre todo para el búlgaro debido al potente saque del americano.

Así lo lograron en una manga que se determinó en el tie-break, gracias en parte a las buenas estadísticas con el primer servicio. Dimitrov centró su juego en arrimarse a la red y cubrir el espacio para que el envío de Sock no le pudiera pasar, un movimiento que le salió de manera perfecta al tenista. Sock se basaba más en buscar golpes ganadores desde el principio para que el peloteo durara la menor cantidad de tiempo posible, ya que sabía que en esas condiciones era inferior a Dimitrov.

Sin embargo, la muerte súbita decidió que el set fuera para Sock. El americano terminó con mejores números cosechando quince winners por trece de Dimitrov. Además también cometió menos errores forzados (11) que su rival (13).

Un plácido paseo de Sock

Los dos sets cerrarían la victoria del americano mostrando un punto de superioridad sobre el búlgaro. Un Dimitrov que no está encontrando su juego desde que comenzó 2015 y que está provocando una lluvia de críticas.

En la segunda manga pudo variar la tendencia cuando el número once del circuito tuvo dos bolas de quiebre al servicio del americano. No la aprovechó y dejo libre a un Sock que no desaprovecharía ninguna de las dos bolas de rotura consiguiendo dos breaks y sentenciar por la vía rápida la segunda manga.

La cabeza del búlgaro comenzó a pasarle factura y a realizar errores con golpes sencillos. Esto le costó perder su saque en el primer servicio que hacía en la tercera manga. Un break que no pudo recuperar en todo el set, por lo que el americano accedió a segunda ronda de una manera sencilla para alegría de él, pero para tristeza del aficionado que esperaba más batalla de una de los tenostas considerados a dominar el circuito en los próximos años.