La jornada en Stuttgart se abría con el partido entre estos dos tenistas en la pista central. El cielo alemán se presentaba encapotado, como viene siendo habitual en todas las jornadas, para recibir a Viktor Troicki y a Alexander Zverev, hijo del tenista homónimo ruso. El favorito en esta ocasión era la raqueta serbia que es el octavo cabeza de serie del torneo y que llegaba de ganar en dos sets a otra promesa del tenis: Borna Coric. Por su parte, Zverev llega al torneo de Stuttgart como wild card y sufrió en primera ronda para vencer a Pavic. Con estos antecedentes era normal que el favorito para esta eliminatoria fuese el tenista serbio.

El partido comenzó en la pista central y la sensación que nos dejaba era de que Troicki iba a intentar solucionarlo con sus servicios. Mantuvo con saques fuertes y directos su primer servicio ante lo cual no pudo hacer nada Zverev. El primer mazazo para el tenista alemán llegó en el segundo juego donde Troicki consiguió hacer la rotura sin demasiadas complicaciones. El serbio volvió a mantener su servicio con bastante solvencia y dejó encarrilado el primer set. Zverev no veía por donde podía atacar a su rival, que estaba haciendo un juego bastante brillante. De nuevo estuvo cerca de la rotura Troicki, pero esta vez supo mantener su saque el alemán. El primer set estaba siendo un constante intercambio de winners por parte de los dos tenistas; esto dificultaba mucho la posibilidad de hacer break. Ambos tenistas mantuvieron sus servicios con solvencia y, sin demasiados problemas, Troicki se llevó el primer set por un 6-3.

El serbio fue superior en el primer set, pero Zverev terminó el primer envite mostrando su mejor versión y, a pesar de sus dieciocho años, dando muestras de serenidad y madurez en los momentos difíciles. El segundo set prometía ser como el primero, sin muchas dificultades para el serbio.

No comenzó bien el segundo parcial para Zverev que tuvo que levantar dos bolas de break. El alemán consiguió ganar esas bolas y mantuvo su servicio, pero no ponía en apuros a su rival. Troicki estaba más que cómodo sobre la pista y consiguió romper el segundo servicio de Zverev dejándole en blanco. Parecía que el alemán no se iba a reponer de esta rotura y que había firmado su sentencia para el partido. Los juego venideros así lo demostraron y, el alemán, no pudo acortar distancias en el marcador. Pero cuando nadie apostaba por él, este sacó fuerzas de flaqueza para hacer break e igualar un set que iba a derivar en el tie break. En la muerte súbita tuvo que defender Zverev dos bolas de partido y, con la ayuda de la cinta de la red, consiguió levantarlas y, con su servicio, anotarse el segundo set.

Zverev daba la cara en el partido pero, más que su juego, lo que le hizo anotarse el segundo set fue más la suerte que el juego. Es cierto que ambos tenistas estaban jugando muy bien, pero la suerte fue un factor que estuvo del lado del alemán y que dio la espalda al tenista serbio. El partido desembocó así en el tercer y definitivo set.

El tercer set fue similar al primero y Troicki jugaba un mejor tenis que su rival. Zverev se defendía como gato panza arriba de las acometidas de su rival, pero el serbio se iba desmarcando punto a punto como vencedor de la eliminatoria. Las fuerzas de Zverev cedieron en su segundo servicio y Troicki se puso con un break de ventaja. A partir de aquí Troicki hizo un juego más conservador y no dio oportunidad a Zverev para la sorpresa. Al final acabó el tercer set como el primero: 6-3.  

El partido nos dejó la mejor versión de estos dos tenistas que viven del saque y de los winners. Dos tenistas con un estilo de juego muy parecido que al final acabó ganando Troicki. En cuanto a Zverev podemos decir que está mejorando desde su primera aparición en un Challenger y demuestra que va a ser una de las raquetas que estarán arriba en el ranking en un futuro; y es que no hay que olvidar que ocupa el puesto 84 con dieciocho años recién cumplidos. Troicki avanza una ronda más y se planta en cuartos de final donde jugará contra el vencedor del choque entre Groth y Feliciano López. El serbio está teniendo un buen debut en la hierba alemana.