El primer paso en un arduo camino siempre es importante, y resulta vital darlo con decisión y seguridad en sí mismo, sin titubeos. Nadal comenzó el camino que podría llevarle de nuevo a la gloria, de la mejor manera posible. Victoria en tres sets ante un voluntarioso pero manso Bellucci, que le dan confianza y le sitúan en segunda ronda con rodaje y apenas desgaste físico.

Sólido y sin fisuras... o casi

El saque del manacorí no fluyó como ha de hacerlo en un Grand Slam, y aún más en Wimbledon. El español estuvo muy vivo de piernas y dominó el encuentro en todo momento, pero las cinco dobles faltas cometidas y tan solo un 61% de primeros saques, lastraron su confianza y la mordiente de su juego.

21 golpes ganadores y 21 errores no forzados para Nadal

Aún y así, Nadal jugó agresivo. Prueba de ello son las 16 subidas a la red que realizó, ganando el punto en todas salvo una ocasión, lo que muestra a las claras como el manacorí adapta su juego a la hierba e intenta acortar los puntos en la red.

Bellucci dio la cara pero tenía un límite claro; el del talento. El brasileño es un jugador que no ostenta golpes carismáticos que puedan inquietar, desplegando un tenis polivalente y regular, que sufre mucho ante jugadores sólidos como Nadal. El brasileño no tiene en la hierba su superficie favorita, y se le vio con algunos problemas a la hora de desplazarse. Sus golpes excesivamente liftados, permitieron a Nadal tomar la iniciativa con recurrencia.

No inquietó en ningún momento Bellucci al español, a pesar de romperle dos veces el saque, ya que Nadal reaccionó inmediatamente. Fue un partido similar al disputado entre ambos en 2012, cuando Nadal ganó también en tres sets, aunque sufrió algo más en la primera manga, que se fue al tiebreak. Rival idóneo para coger ritmo de competición y confianza.

Dustin Brown, próximo rival

Es uno de esos jugadores temido por todos en Wimbledon. Procedente de la previa, el jamaicano nacionalizado alemán, es un especialista en esta superficie. Tenista showman, es capaz de hacer golpes imposibles, y ostenta un esquema de juego claro: saque y volea.

Brown y Nadal en Halle, 2014. Foto: atpworldtour

Brown retrotrae a los aficionados a ese tenis clasicista en la red, aunque dándole un toque gamberro con su apariencia de cantante de reggae y el aire desgarbado que le acompaña allá donde va. Nadal se cruzó con él en Halle hace poco más de un año, y cayó derrotado por 6-4 6-2, en una auténtica exhibición de Brown.

El alemán ha derrotado en la primera fase a Lu, por 3-6, 6-3, 7-5 y 6-4, y promete un gran espectáculo en su duelo frente al español. Nadal habrá de estar muy atento y vivo de piernas para restar bien y dificultar las recurrentes subidas a la red de Brown.

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Sobre el autor
Diego Jiménez Rubio
Fui Coordinador General de Más Deportes y Viajes, y miembro del Consejo de Dirección de VAVEL España. Me encanta comunicar mi pasión por el turismo y el deporte, y hacerlo con responsabilidad y profesionalidad.