Los españoles siempre han tenido la tierra batida como superficie preferida. En el polvo de ladrillo, los tenistas nacionales han obtenido sus mayores logros, y siempre han mostrado preferencia por este tipo de superficie. Sin embargo, siempre hay excepciones, y en el caso de España, el ejemplo más claro es Feliciano López. El jugador toledano, debido a su estilo de juego, siempre se ha sentido cómodo sobre la hierba o sobre superficie dura.

Así, Feliciano llegaba a Wimbledon confiado en poder encontrarse a sí mismo y ofrecer un buen rendimiento, ejecutando ese saque y volea que tanto le gusta. Al otro lado de la red se encontraba el belga Steve Darcis, un trabajador del deporte de de la raqueta que siempre planta batalla independientemente de la entidad del rival. El partido se antojaba complicado para el español, y las expectativas se cumplieron desde el primer momento.

El encuentro comenzó con el toledano muy cómodo sobre la pista y siendo muy fiel a su estilo de juego, gestionando bien el servicio y las subidas a la red, donde tuvo una gran efectividad. Además, ‘Feli’ cometió muy pocos errores no forzados y supo leer el partido y aprovechar las bolas de ‘break’ de las que dispuso, por lo que terminó haciéndose con el primer set por un contundente 6-2.

La situación varió en el segundo parcial, pues el español comenzó a mostrarse más errático y el jugador belga comenzó a precisar más sus golpes, lo que provocó que se equilibrara el encuentro. Esta igualdad llevó el set al ‘tie-break’, donde la experiencia y el mayor acierto en los momentos clave del toledano hizo que la manga cayera de su lado por 7-6 (7-4).

Perder el segundo set en el juego definitivo fue un duro golpe para la moral de Steve Darcis, que aún así demostró entereza y plantó cara a Feliciano en el tercer parcial. Pero el jugador belga se encontró con la mejor versión al servicio del jugador toledano, que en esta ocasión sí mostró sus grandes virtudes como tenista. Pese a cometer un mayor número de errores que su rival, el español consiguió unos excelentes porcentajes con el saque y se mostró seguro también desde el fondo de pista y en la red, sin conceder bolas de ‘break’ al Darcis.

Pese a esa mejor versión de Feliciano López, el set estuvo relativamente igualado, pero terminó cayendo del lado del español por 6-4, cerrando de esta manera el partido. El belga se despide así de la primera ronda de Wimbledon, mientras que el jugador manchego, cabeza de serie número 15, se medirá en segunda ronda al georgiano Nikoloz Basilashvili, número 153 del ránking ATP.