Elegancia, saber hacer e inteligencia son conceptos aplicables a Tommy Robredo, tanto dentro como fuera de la pista. Es el gerundense un jugador comprometido con el tenis, que ama este deporte y que deja traslucir ese amor en todas sus actuaciones. 33 años amparan a un tenista muy valorado y admirado en el circuito, al que no se le han caído los anillos por tener que desplazarse a Vladivostock a liderar a su país, tras estar cuatro años sin jugar en la Copa Davis.

Asentado en los puestos nobles de la ATP, Robredo está teniendo un 2015 con resultados mucho más modestos que en los dos años anteriores, donde su tenis alcanzó cotas muy elevadas. El otrora quinto mejor jugador del mundo ostenta un bagaje de partidos y situaciones tenísticas que le reportan una gran ventaja en eventos tan destacables como esta eliminatoria ante Rusia.

Rublev, talento e irregularidad a partes iguales

Eso es aún más palpable frente a un joven imberbe como Rublev. Campeón junior de Roland Garros y el Masters, este ruso de 17 años tiene un gran futuro por delante, pero solo si es capaz de cambiar radicalmente su mentalidad y físico.

Aún endeble y con problemas para mantener la intensidad durante mucho tiempo, Rublev tiene golpes de gran calidad pero sus vaivenes emocionales acaban por condenarle. Robredo supo gestionar a la perfección este hecho, y buscó variar alturas y velocidades, trabajando bien con su revés cortadito y forzando errores del ruso.

Peleó cada bola el catalán, y apretó los dientes cuando el juego de Rublev fluía libre y puro. Con 2-2 en el primer set, Tommy encadenó dos grandes juegos, que hundieron moralmente al ruso. Algo similar ocurrió en el segundo parcial, donde Tommy rompió el saque del ruso mediado el set, neutralizando el juego agresivo de Rublev, y demostrando que el tenis no es solo potencia.

Robredo estuvo muy acertado y maduro en momentos cumbre

Ya con todo en contra, Rublev se atrevió aún más en la tercera manga, pero Robredo fue una muralla inexpugnable para el ruso. Con un capitán muy poco dinámico, el joven ruso fue cavando su propia tumba con cada error no forzado que cometía, y Robredo se agigantó hasta alzar los brazos en señal de victoria.

Rublev en 2015. Foto: atpworldtour

Importante victoria

Este encuentro se antojaba clave para el devenir de la eliminatoria. Es Rublev el jugador más peligroso, aparentemente, del combinado ruso, por lo que el hecho de haberle derrotado y con esta contundencia, supone un acicate de moral para España, y otorga a Pablo Andújar la tranquilidad necesaria para hacer su mejor tenis y dar el segundo punto de la eliminatoria.

Rublev ha demostrado tener mucho talento pero también la necesidad de intenso trabajo mental y físico para poder llegar a ser un jugador de referencia. Robredo le pasó por encima, y dio el primer punto a España. El camino hacia el Grupo Mundial ha comenzado.