Hace apenas cuatro meses Carla Suárez se erigía en la revelación del año en el tenis femenino. Sus excelsas actuaciones en Amberes, Dubai, Doha, Indian Wells, y muy especialmente, en Miami y Roma, donde alcanzó la final, propiciaron su entrada al top10, y la admiración de todo el mundo del tenis.

Carla era una rival temible, capaz de desplazarse a la perfección sobre la pista y desbordar con su derecha, manteniendo ese revés a una mano preciso y seguro que tanto la caracteriza. Cuatro meses después, la canaria se muestra como una jugadora insegura, sin confianza en su juego, incapaz de hacer daño a las rivales con unos golpes poco incisivos, y bloqueada mentalmente. Así es el tenis. A Carla no le queda otra que luchar contra sí misma para salir de esa espiral negativa, y qué mejor lugar para hacer que el US Open.

Contra la maldición de los Grand Slam en 2015

Entre febrero y mayo Carla Suárez vivió los mejores momentos de toda su carrera deportiva. Eso hizo que su inesperada derrota en primera ronda del Abierto de Australia, quedara como un mero accidente. Carina Withoef, 104 del mundo, derrotó a la canaria por 6-3 6-1, en un partido inexplicable de la española, en el que no rindió ni tan siquiera cerca de su nivel.

Esto no sirvió más que para motivar a la española, que llegó pletórica a Roland Garros. Sus grandes resultados en torneos previos la situaban como una de las favoritas al título, pero en tercera ronda se bloqueó totalmente con su servicio, y sucumbió ante la experimentada Flavia Penneta. Duro golpes para Carla, que vio cómo el torneo que llevaba preparando meses, se le escapaba mucho antes de lo previsto.

Dura derrota en Wimbledon ante una adolescenteAún dolida por ello, llegó la temporada de hierba. Territorio comanche para una Carla que sufrió un severo castigo en Wimbledon, al verse superada de principio a fin por una joven adolescente llamada Jelena Ostapenko. 6-1 6-0 en contra, en lo que supuso una de las derrotas más duras de la ca rrera de Carla.

No ha levantado cabeza desde ese momento. Así pues, lo que han sido quebraderos de cabeza durante todo el año, puede convertirse en el antídoto a todos sus males. Y es que si Carla recupera la chispa en su juego y logra hacer un gran US Open, pocos se acordarán de estos últimos meses de sucesivas derrotas.

Oportunidad para ganar puntos

En 2013 se produjo su mejor actuación, llegando a cuartos de final

La española defiende una tercera ronda cosechada el año pasado. No es el US Open el torneo preferido de la española, pero en 2013 pudo rendir a un alto nivel, ganando a jugadoras como Lauren Davis, Coco Vandeweghe y Jie Zheng. La frenó en seco Serena Williams en cuartos de final, una ronda que no alcanzaba una jugadora española desde que lo hiciera Arantxa Sánchez-Vicario en 1998. 6-0 6-0 fue el resultado para la menor de las Williams.

Serena Williams y Carla Suárez en US Open 2013. Foto: usopen

El año pasado, Carla no pudo defender ese resultado, y cayó en tercera ronda ante Kaia Kanepi por 7-5 6-0. Fue una inesperada y dolorosa derrota, después de que logara vencer a buenas jugadoras como Tomjlanovic y Vandeweghe de nuevo.

Así pues, si Carla se reencuentra a sí misma y es capaz de jugar con una buena movilidad de piernas y frescura mental, puede hacer un buen torneo. En tal caso, tan solo con ganar dos partidos igualaría el resultado del año pasado, por lo que las opciones de sumar puntos en Nueva York que la consiliden en el top10 e incluso la hagana escalar algún otro puesto, son elevadas.