Con la satisfacción del deber bien hecho. Así se presentaba Roberto Bautista en rueda de prensa, tras su brillante victoria ante un joven con mucho futuros. Pierres-Hugues Herbert llegaba repleto de confianza tras su puesto de finalista en Winston Salem, y dispuesto a aprovechar la wildcard que le fue concedida por la organización del US Open.

El jugador castellonense es todo un seguro de vida, mostrándose muy regular a lo largo de la temporada, y ganando a los que son peoresque él así como perdiendo contra los que son mejores. Bautista consideró "una importante victoria e importante empezar con buen pie", aunque el último set tuvo serias alternativas y el francés llegó a gozar de una bola de break, el español afirmó: "He jugado valiente en los puntos decisivos. Este chico te da muy pocas oportunidades al resto y los break points los he jugado bastante bien. He empezado muy intenso, he encarrilado enseguida el marcado y eso me ha tranquilidad."

Cuestionado ante el gran día del tenis español en Nueva York, donde tan solo Pablo Andújar perdió, Bautista respondió categóricamente diciendo que "España es la mayor potencia mundial del tenis". Precisamente buscará ante un compatriota la tercera ronda, más concretamente contra Pablo Carreño-Busta. 

Se vaticina un duelo apasionante entre el gijonés y el de Castellón, en el que ambos llegan en plenitud de condiciones ya que Bautista restó importancia al hecho de aparecer con una bolsa de hielo en su codo, calificándolas como "simples molestias, nada importante".

Dos españoles por un puesto en tercera ronda. Bautista parece empeñado en igualar su mejor resultado en el US Open, que se produjera el año pasado cuando alcanzó los octavos de final. Si ganara a Carreño, se vería las caras con el vencedor del duelo entre Goffin y Berankis, y su potencial rival en octavos de final es Novak Djokovic, por lo que el objetivo a seguir para el español ha de ser alcanzar esta ronda.