Dicen que mala hierba nunca muere, así que a tenor de los resultados en los últimos años, se puede poner en duda la bondad de Kimiko Date-Krumm. Lleva quince años siendo veterana y hablándose de su retirada próxima, pero la que llegara a ser número cuatro del mundo en 1995, continúa siendo competitiva 20 años después.
El caso de Kimiko es digno de estudio. Hay jugadores ya entrados en la cuarentena que siguen disputando el dobles, pero nadie ha osado prolongar tanto su carrera en individuales, y además con cierto éxito. Kimiko no está entre las 100 mejores del mundo, pero es competitiva allá donde va, y capaz de ganar encuentros de mucho nivel.
Así lo hizo frente a Alja Tomljanovic en la primera ronda del torneo de Corea. Tomándose la revancha de lo acaecido hace apenas una semana, cuando la croata la derrotó en octavos de final del torneo de Tokio, Date-Krumm no se apiadó de una fatigada y desconcentrada Tomljanovic, que vio cómo una mujer que podría ser su madre, la zarandeaba tenísticamente hablando. 6-1 6-2 fue el resultado final, en lo que supuso todo un correctivo, y una hazaña más en la carrera deportiva de esta jugadora. Sloane Stephens será su próxima rival.
Triunfadora generación del 96
Sasnovich, Kulichkova y Siniakova. Una bielorrusa, una rusa y una checa, unidas por su fecha de nacimiento. Las tres tienen 19 años, y un enorme talento que aún han de seguir puliendo para tener continuidad. En Seúl parecieron inspiradas en primera ronda, imponiéndose a rivales muy complejas, sobre todo en el caso de la bielorrusa.
Sasnovich logró apear del evento a la sexta cabeza de serie, la rumana Alexandra Dulgueru, por un resultado de 6-3 6-2. La que actualmente es 136 del mundo, mostró un estelar nivel de juego. Muchos apuntan a ella como una jugadora de tremendo futuro, aunque aún está por eclosionar.
Algo más consolidada está ya Siniakova. La número 69 del ránking mundial pudo con la estadounidense Irina Falconi, que venía de competir en Tokio. Prácticamente igualadas en el ránking, el encuentro fue un constante de idas y venidas, en el que Siniakova aprovechó una cierta relajación de Falconi al inicio del tercer set, para endosarse un "rosco" final, e imponerse por 6-3 2-6 6-0.
La otra gran victoria del día para jóvenes jugadoras, fue la protagonizada por la rusa Kulichkova, 102 del ránking. Pudo con la irregular Heather Watson, que alterna actuaciones estelares con derrotas sonrojantes. Aún recuerda Heather su encuentro en Wimbledon ante Serena, después del cual ha competido poco y ganado aún menos. 6-4 3-6 6-3 fue el resultado final a favor de la rusa.