La bipolaridad se queda corta para analizar el juego y la actitud en pista de Feliciano López. Capaz de ganar a los mejores y perder con jugadores muy inferiores a él; capaz de maravillar y desesperar, de gritar a los cuatros vientos y agarrarse a la pista como nadie cuando está motivado, a llevar a cabo monólogos pesimistas sin cesar cuando las cosas no le salen.

En este 2015 se está viendo al Feliciano López en esencia. Llegó a ser número 12 del mundo, partiendo como favorito en muchos torneos, y en lugar de aprovecharlo, mostró una arrogancia y displicencia en pista que le condenaron a perder muchísimos partidos, y bajar puestos en el ránking. Cuando ya todo parecía perdido, algo hizo "click" en la mente del toledano, que encontró en Cincinnati a su otro yo. A partir de ahí, Feli es casi imparable, y mucho más en una pista rápida como la de Kuala Lumpur.

Capacidad mental para remontar

Pospisil siempre es un jugador completo. Versátil y potente, el canadiense tiene la capacidad de hacer grandes resultados, como este mismo año en Wimbledon. Su irregularidad durante los partidos le condena a no estar en una mejor situación en el ránking, estando ahora en el puesto 44. Sin embargo, en el primer set Pospisil se mostró inconmensurable. También Feliciano López, lo que hizo que ninguno de ambos tuviera una sola posibilidad de romper el saque del rival.

Reacción magistral de Feliciano a la pérdida del primer set

Se encaminó la primera manga a un tiebreak donde algunos errores no forzados, condenaron al toledano. Esto, que hace unos meses hubiera desencadenado un espectáculo verbal poco constructiva y edificante de Feliciano, en esta ocasión no fue más que un acicate. Rompió el servicio en los primeros compases del segundo set, y se mostró inconmensurable al servicio.

Pospisil en Kuala Lumpur. Foto: atpworldtour

Lo intentaba todo Pospisil, pero tras perder el segundo set pareció perder la fe en la victoria. Enseguida tomó ventaja el toledano, y aunque tuvo un ligero desliz al servicio, pronto se recuperó y certificó una gran victoria con un 6-2 en el tercer parcial. Moral y puntos para el español, que en caso de ganar el torneo podría seguir escalando posiciones en el ránking, e incluso optar a ir a Londres a final de temporada, al menos como reserva. Para ello, tendrá que vencer en unas semifinales que se antojan muy complicadas.

Nick Kyrgios sale vivo del bombardeo

Karlovic y Kyrgios protagonizaron uno de los duelos de cañoneros más despiadados del circuito. No se rompieron el saque en ninguna ocasión, y el encuentro se decidió en dos tiebreaks, donde una movilidad más intensa del australiano, y su capacidad para jugar buenas bolas a los pies del croata, decantaron la balanza.

Kyrgios no está pasando por un buen momento de tenis, descentrado totalmente y más protagonistas por episodios extradeportivos que por lo que hace en la pista. Sin embargo, parece haber encontrado el remedio en Malasia, donde está haciendo un gran tenis.