La competición llega a su fase final, y el inevitable paso de los días es sinónimo de incremento de un nivel de tenis impropio de chicos de 15 y 16 años.

En estos días, el polvo de ladrillo de la Caja Mágica se convierte en testigo incuestionable del brillante futuro del tenis. Ciertos nombres comienzan a resonar con fuerza, llamados a ocupar en un futuro no muy lejano los puestos de privilegio del ranking ATP.

Semifinales muy dispares las de hoy. Mientras que Canadá apenas sufrió para derrotar a Rusia, los alemanes, liderados por un imperial Nicola Kuhn, tuvieron que sudar la gota gorda para derrotar al equipo japonés.

Canadá no encuentra rival

Con el Estadio 3 como escenario, Canadá y Rusia se jugaban uno de los dos puestos para la gran final del domingo. Los canadienses llegaban con la vitola de grandes favoritos, pues no habían cedido un solo partido en su camino hasta las semis. Y los pronósticos se cumplieron.

Primero fue Denis Shapovalov quien derrotó a Alen Avidzba por 6-4 y 6-3 en un partido que dominó de cabo a rabo, siendo muy agresivo sobre el saque de su rival.

Felix Auger Aliassime, uno de los principales atractivos de la cita, fue el encargado de cerrar la eliminatoria. El canadiense se mostró implacable con su potente servicio, imponiendo un ritmo que Artem Dubrivnyy solo pudo aguantar en los primeros instantes. Aunque le costó más de lo previsto, Aliassime consiguió cerrar el partido por 6-4 y 7-5 en algo más de hora y media.

Canadá (Fotografía: Mutua Madrid Open)

La guinda del pastel llegó en un dobles intrascendente en el que Shapovalov y Aliassime arrasaron a Avidzba y Sokolovskiy (6-1 y 6-3).

Nicola Kuhn, nuevo héroe teutón

La segunda semifinale entre Alemania y Japón se preveía como el choque estelar de la jornada debido a la igualdad y el altísimo nivel de ambos equipos. Así fue, y tanto germanos como nipones nos brindaron la mejor eliminatoria de lo que va de competición.

El primer partido enfrentaba a Marvim Moeller y a Yunosuke Tanaka. El japonés comenzó mucho más metido en el encuentro y tras un apabullante 5-0 inicial, terminó llevándose el set por 6-3. Reaccionó Moeller en el segundo y subió el listón para igualar el partido a un set. Pero en el tercer y definitivo parcial, las dudas volvieron a posarse en la raqueta alemana, que a punto estuvo de culminar una remontada épica, pero terminó sucumbiendo por 6-4 en el tercero.

Llegó entonces el turno del héroe del día y, probablemente, del Nicola Kuhn salvó dos bolas de partido en el segundo settorneo. Afincado en Valencia y de marcados rasgos teutones, Nicola Kuhn es uno de esos jóvenes talentos que destacan por encima del resto, debido a su infinito talento y su capacidad competitiva. Tras perder el primer set en el tie break ante el genial Horie, el germano remó y remó, salvando incluso dos bolas de partido, para forzar un tercer set. En esta última manga, Nicola destapó el tarro de las esencias y aniquiló al japonés por un contundente 6-1.

Moeller y Kuhn (Fotografía: Diego G. Souto)

Sin apenas descanso, Nicola Kuhn volvió a la pista para jugar el decisivo punto de dobles junto a Moeller. Los germanos gestionaron mejor la presión y se metieron en la final tras doblegar a Horie y Tanaka por un doble 6-3.

Mañana se disputarán las eliminatorias entre el 5º y el 12º puesto, mientras que la gran final queda reservada para un domingo que sin duda será de altos vuelos.