Con solvencia, decisión y hambre de victoria...pero sin presión. Así juega Stan Wawrinka en Tokio, y así fluye su juego; libre y sin ataduras. Teniendo asegurada su plaza en la Copa de Maestros, el helvético se prepara para dicha cita, y lo hace buscando con ahínco un nuevo título en su palmarés, que sería el cuarto del año.

No ha vuelto a mostrar el nivel del que hiciera gala en París desde que ganó Roland Garros, pero Stan sigue siendo un peligro. Su juego se adapta a la perfección a la pista dura, y en Tokio se le está viendo jugar a las mil maravillas. Era el primer cabeza de serie y quiere hacer gala de ello.

Muller sucumbe a los buenos restos del suizo

Se sabía lo que venía. Un jugador con un saque macabro y gran agilidad para subir a la red. Siempre dentro de pista, siempre llevando la iniciativa, pero teniendo que jugar al límite para tener opciones. No es fácil que este tipo de tenistas sorprendan a los mejores cuando éstos se encuentran concentrados. Y Wawrinka lo estuvo.

Dos sets muy diferentes pero con mismo resultado

Muy sólido con su servicio desde el primer momento, el helvético pudo emplear energía en activarse al resto y aprovechar la progresiva decadencia de Muller en porcentaje de primeros saques. El primer set se resolvió con un solo break, y ninguna oportunidad de rotura para Muller.

El segundo set fue mucho más abierto, con alternativas para ambos que ocasionaron dos roturas de break para cada uno. Se desató el espectáculo, y los jugadores lucían nerviosos. Siempre impone meterse en una final. En este territorio Stan se mueve mucho mejor. El encuentro se encamino a un tiebreak en el que el de Lausana estuvo más acertado en los momentos cumbre y cerró un encuentro que puede ser la antesala de un título.

VAVEL Logo
Sobre el autor
Diego Jiménez Rubio
Fui Coordinador General de Más Deportes y Viajes, y miembro del Consejo de Dirección de VAVEL España. Me encanta comunicar mi pasión por el turismo y el deporte, y hacerlo con responsabilidad y profesionalidad.