Momentos complicados los que está viviendo Eugenie Bouchard, y es que tras vivir una temporada de altibajos y continuos resultados desesperantes, las malas noticias se agravaron para la tenista canadiense en el último Grand Slam de la temporada, el US Open, cuando sufría una caída en el vestuario que le provocaba una conmoción cerebral, haciéndole imposible saltar a la pista para medirse a la italiana Roberta Vinci.

Bouchard se recupera para volver a la competición

Más de un mes después de la caída Bouchard no se ha recuperado aún, explicando la tenista canadiense que la caída sufrida había surgido a raiz de entrar al vestuario con la luz apagada, e intentar buscar el interruptor, yéndose al suelo por culpa de sustancia resbaladiza, extranjera y peligrosa, que pisó, golpeándose con la nuca en la cabeza. Intentó volver a la acción en el pasado WTA Beijing, pero Eugenie se tuvo que retirar en el partido ante la alemana Andrea Petkovic cuando estaba 2-6 y 1-1 abajo, tras sufrir nuevos síntomas de la conmoción, tal y como explicó posteriormente ante los medios de comunicación: "Desafortunadamente, no me sentí lo suficientemente bien como para terminar el partido, pensaba que estaba físicamente preparada, pero volvieron los síntomas de mi conmoción cerebral".

Tanto Eugenie Bouchard como su gabinete de abogados emitieron un comunicado, en el que explicaron que la demanda contra la Federación de Tenis de los Estados Unidos llegaba a raiz de una neglicencia. "El resbalón y la caída fueron causados o creados peligrosamente por los acusados en la sala de fisioterapia del vestuario femenino. Ese acto de negligencia ha supuesto un factor determinante en las lesiones de la señorita Bouchard. Debería haberlo hecho al final de la jornada, cuando nadie hubiera quedado en las instalaciones y en caso contrario, debería haber cerrado la puerta por seguridad", explicaron