En la comparecencia ante los medios de comunicación de ayer, el serbio y número uno del mundo volvió a ofrecer, desde la distancia, algún consejo a un Kyrgios que se ha vuelto a ver envuelto por la polémica debido a los problemas de conducta que se han visto reflejados sobre la cancha del Masters 1000 de Shanghai.

El número uno del mundo aseguró que aún le queda mucho por mejorar a Kyrgios en lo que al control de la situación se refiere

El de Belgrado aseguró que: "No hay duda de que tiene el potencial para ser un gran jugador", y valoró sus principales armas en lo que al juego se refiere: "Ha ganado a algunos jugadores top. Todavía es muy joven. Tiene un gran servicio y un gran juego en general. Tiene confianza en la cancha". Pero finalizó afirmando que: "Pero puede dejarse llevar un poco porque no es capaz de mantener la concentración hasta el final".

En el encuentro ante el japonés Kei Nishikori, el australiano firmó un gran primer set pero terminó cayendo en tres mangas. Djokovic habló también sobre el encuentro diciendo que: "Creo que ese fue el caso en su partido ante Kei. Fue el mejor jugador del partido pero Kei, debido a su experiencia y mejor enfoque, logró mantenerse más paciente en los momentos importantes y esperó a que sus oportunidades llegaran. Por eso ganó el partido".

El número uno del mundo tiró de las orejas al de Canberra y le dio algún que otro consejo "Creo que Nick tiene que aprender de este tipo de partidos, escuchar los consejos de personas con más experiencia, especialmente de su país como Pat Rafter, Rod Laver, todos los grandes que han hecho grande la historia de este deporte. Estoy seguro de que saben y entienden el tipo de retos mentales que está enfrentando. Ellos entienden lo que se necesita. Él tiene que tratar de trabajar de verdad en ello, conseguir ser mentalmente más fuerte".

Aún no ha llegado el día en el que el australiano sepa controlar esa energía y ese impulso que hacen que su gran tenis se vea empañado por unos modales impropios de un campeón. Justo lo que él lucha por ser algún día.