Nadal vuelve a ser Nadal. O por lo menos está cerca de recuperar su mejor nivel como pudo demostrar en el encuentro de cuartos de final de este Masters 1000 chino ante un rival de quilates como Stan Wawrinka al que barrió en apenas una hora de encuentro y que estuvo durante todo el choque a merced del tenista balear.

El español volvió a demostrar su mejor nivel con su golpe predilecto, la derecha, y no cedió ni un solo juego con su servicio, demostrando una gran fiabilidad y derrochando un tenis exquisito que hizo vibrar al público chino, deseoso, como todo amante al deporte de la raqueta, del resurgir de Rafa.

Rafa, de 10

Comenzó extraño el encuentro para un tenista, el manacorí, que tuvo que ver como en el primer punto del partido y con su servicio, cometía la primera doble falta. Sin embargo, Nadal se repuso y consiguió meterse en la buchaca el primer juego para intentar poner en aprietos al suizo al resto, 1-0.

El helvético parecía, en este inicio de choque, que no quería entrar en el cuerpo a cuerpo con Rafa Nadal y evitaba los puntos largos. Rápido Wawrinka armaba el brazo con virulencia para intentar enviar la bola a la línea. De momento, en el primer juego con su saque, le salió bien para igualar la contienda, 1-1.

Nadal se aprovechaba de los 17 errores no forzados de Wawrinka y se apuntaba el primer set por 6-2, en 32 minutos de juego

El partido avanzaba y se iba ya hasta los 25 minutos de juego cuando el español dio el primer latigazo importante a su rival y al choque consiguiendo el primer break en el sexto juego gracias a su derecha que comenzaba a entrar como cuchillo en mantequilla y a los errores del cuatro del mundo, al que no se le veía nada cómodo sobre la central de este Masters 1000 de Shanghai. 4-2 para el balear que confirmaba a renglón seguido esa rotura para el 5-2.

Tocado, el de Laussana intentaba, por todos los medios, meterse otra vez en el duelo, pero se le veía acelerado, con una actitud un tanto pasiva y desconectándose punto a punto, cada vez más como se pudo ver en el octavo juego con servicio para Stan. Nadal se aprovechaba de los 17 errores no forzados del helvético y con un nuevo break se apuntaba la primera manga, en tan solo 32 minutos, por 6-2.

Nadal imposibilita la reacción del suizo y se mete en semifinales

Wawrinka comenzaba con una mejor mentalidad al resto en este segundo parcial y echando atrás a Rafa con su derecha, pero el siete del mundo estaba en uno de esos días en los que se había puesto el traje de ex número uno del ránking ATP. Volaba sobre la pista asiática y no dejaba el más mínimo resquicio al rival para que se metiera en el encuentro.

El revés a dos manos del balear aparecía y el residente en St. Barthelemy continuaba sumando errores no forzados para que Nadal, a las primeras de cambio también en el segundo set, consiguiera la tercera rotura consecutiva y el 2-0 y servicio en este inicio del parcial que iba a ser, a la postre, definitivo.

Nadal pasó el rodillo, venció a Wawrinka y se medirá en seminfinales a Jo-Wilfried Tsonga

En el tercer juego de esta segunda manga, el suizo presionó con 0-30 para volver a meterse en un encuentro con claro color rojigualda, pero de nuevo, Rafa cerró todas las puertas y literalmente dio un portazo en la cara del helvético imposibilitando toda reacción del helvético poniendo el 3-0.

El manacorí continuaba a lo suyo, sin desconcentración alguna y sin contagiarse de un rival que estaba firmando su peor partido en mucho tiempo. Los errores no forzados del íntimo amigo de Roger Federer seguían penalizando al cuatro del mundo y el partido se le ponía en bandeja a Nadal con el 4-0.

El español pasó el rodillo, demostró que continúa con su mejora y barrió en esta segunda manga a un desconocido Stan Wawrinka por 6-1 en apenas media hora de juego. Rafa se medirá en semifinales de este Masters 1000 de Shanghai a Jo-Wilfried Tsonga que derrotó a Kevin Anderson en tres sets, 7-6, 5-7, 6-4.

Fotografías: Zimbio