El dominio de Novak Djokovic en el circuito ATP ha sido incontestable. Ha ganado diez títulos, mejorando sus resultados de 2011, ha logrado seis de nueve Masters 1000 (Indian Wells, Miami, Montecarlo, Roma, Shanghai y París-Bercy), además de ganar el Open de Australia, Wimbledon y el Us Open. Sin embargo, el gran objetivo del año para Djokovic era completar el Grand Slam consiguiendo el único major que le queda, Roland Garros, pero no fue posible ya que en su camino hacia la historia se interpuso el suizo Stan Wawrinka, dando la sorpresa y llevándose su segundo Grand Slam de su carrera. 

Stan Wawrinka es un jugador con una variedad de golpes indefinida, con un grandioso revés a una mano, considerado por muchos el mejor revés del circuito dentro de dicha categoria; pero lo que siempre le fallaba al suizo era el elemento mental. El suizo se caracterizaba por su falta de agresividad dentro de una pista de tenis y por su falta de confianza a la hora de afrontar grandes retos. En 2013, contrató como entrenador a Magnus Norman, finalista de Roland Garros, que ha conseguido sacar el killer que Wawrinka lleva dentro y le ha convertido en uno de los "cocos" del circuito ATP.

Desde su relación con el entrenador sueco, Wawrinka ha conseguido los mayores triunfos de su etapa como profesional, entre los que destacan los títulos de Grand Slam del Open de Australia 2014 y de Roland Garros en 2015. De sus 11 títulos, ocho los ha conseguido con Norman de entrenador frente a tres títulos sin él. Este es un factor significativo que explica porque Wawrinka se ha asentado en el top ten en los últimos tres años. 

Año 2015 agridulce

El año de Stan Wawrinka no ha sido todo lo regular que se esperaba tras su triunfal año 2014, donde conquistó su primer Grand Slam, un Masters 1000 y la Copa Davis. 

La irregularidad que caracterizaba a Wawrinka en el pasado se ha hecho evidente en esta campaña, donde solo ha mostrado su mejor versión en los cuatro majors. En el resto de los torneos, el papel de Wawrinka se ha quedado en un segundo plano al no conseguir alcanzar la últimas rondas. Su mejor resultado en un Masters 1000 ha sido los cuartos de final en Roma. 

También ha conseguido títulos como el de Chennai, por segundo año consecutivo, el de Rotterdam y el de Tokio; pero sin duda, la gran hazaña del suizo esta temporada ha sido la conquista de Roland Garros superando en la final a Novak Djokovic. Wawrinka dio la gran sorpresa en la arcilla parisina derrotando al que ha sido el mejor jugador del año con mucha diferencia. El suizo completó una semana de ensueño en la que derrotó a grandes jugadores como Tsonga o a su compatriota Roger Federer. 

Su entorchado en París, a parte de ser su segundo triunfo en un "grande", hace que sea el único jugador, junto con Nadal y Federer, que tiene un al menos un título en Roland Garros. Además, se sitúa como cuarto jugador en activo con más títulos de Grand Slam, igualado con Murray. 

En los otros 3 majors cuajó también una gran actuación, alcanzando los cuartos de final en Wimbledon y las semifinales en el Open de Australia y en el Us Open. 

Final de temporada

La gran temporada, en cuanto a títulos, ha llevado a Wawrinka a volver a disputar las ATP World Tour Finals de Londres. El tenista suizo se ha clasificado como cuarto en la ATP Race después de completar un notable final de año con su título en el ATP 500 de Tokio, donde batió en la final a Benoit Paire, y con buenas actuaciones en Shanghai y París-Bercy. 

El torneo de maestros trae buenos recuerdos a Wawrinka, pues el año pasado, año de su debut en este torneo, alcanzó las semifinales superando anteriormente el round robin como segundo de grupo por detrás del que fue el ganador del torneo, Novak Djokovic. A punto estuvo el suizo de debutar en una final el año pasado, pero su compatriota Roger Federer se lo impidió después de un partido muy disputado que terminó con un marcador favorable para el seis veces campeón del torneo de 4-6 7-5 y 7-6. Wawrinka buscará dar la sorpresa de nuevo en este año 2015 y cerrar otro gran año para el tenis suizo.