Saltaba a la vista su potencial, pero en este 2015 le ha dado rienda suelta. Garbiñe Muguruza llevaba tiempo avisando de lo que podía ser capaz de hacer, y a pesar de ganar tan solo un título a lo largo del año, los vibrantes momentos de tenis ofrecidos así como su final en Wimbledon, le han hecho ganarse el cariño de los aficionados y el respeto de las rivales.

Ambas cosas quedan plasmadas en el hecho de que haya sido nominada para un galardón como el de Mejor Jugadora del Año. Supone todo un reconocimiento a la progresión realizada, y al carisma que ostenta la española.

Competidoras de mucho mérito

Sus rivales por dich condecoración no son nada desdeñables. Serena Williams ha visto ensombrecida una temporada que se antojaba histórica, por su derrota en el US Open ante Vinci. A pesar de ello, el haberse adjudicado tres Grand Slam supone toda una hazaña. Flavia Pennetta dio la sorpresa cuand se hizo con el US Open; a su 33 años de edad y despidiéndose del público tras dicho encuentro, la italiana revolucionó el circuito con su encorajinado juego.

Radwanska y Muguruza parecen partir con cierta desventaja

Y por último y no menos importante, Agnieszka Radwanska. La polaca fue de menos a más, y ha finalizado el año por la puerta grande, con una victoria por todo lo alto en Singapur. Con un estilo a contracorriente de lo que se estila en el circuito, Aga se ha erigido en la sorpresa de las últimas semanas de temporada.

No será fácil obtener el galardón, pero el estar en este selecto grupo y haber recibido el reconocimiento de toda la comunidad tenística, Garbiñe Muguruza debe estar satisfecha. La historia acaba de empezar, y quedan muchos años por venir, en los que la española pueda seguir optando a este y muchas otras condecoraciones.