La tenista de Las Palmas de Gran Canaria fue entrevistada por Mundo Deportivo y se mostró optimista de cara a regresar al Top-10 en este año 2016 que está a punto de comenzar y tras un 2015 que no ha sido, ni mucho menos, positivo para sus intereses. La canaria se lanzará a la que espera que sea su mejor temporada, que incluye Copa Federación y Juegos Olímpicos.

Carla Suárez se mostró optimista y con las ideas claras, de cara a este 2016 que está a punto de comenzar

Carla aseguró que este año tiene que mejorar y para ello debe: "Incrementar esa agresividad en mi juego porque el tenis actual va enfocado a eso, a tener el dominio. La idea es conservar esa agresividad el mayor tiempo posible, ser capaz de combinar la solidez propia de mi tenis con esa agresividad en el punto de equilibrio adecuado. Y eso sí, con agresividad no solo tenística, sino también mental".

La canaria, con su 1,62 de estatura, aseguró no sentirse en inferioridad de condiciones cuando tiene que jugar ante tenistas cada vez más altas en el circuito: "Soy distinta. Diferente porque el noventa por ciento de las tenistas se juegan el punto a uno, dos o tres tiros como máximo. A mí también me gustaría tener eso porque te soluciona muchas cosas, sobre todo no tener que estar corriendo en según qué momentos, pero también estoy satisfecha de la variedad que puedo aportar. Las que somos bajitas tenemos que intentar buscar soluciones ante esas rivales que son capaces de rematar pronto el punto con grandes palancas. Hay que compensarlo de alguna manera, con un tenis muy variado y con el toque de agresividad hablado".

Carla Suárez. Fotografía: Zimbio.

Suárez habló también sobre cuál es su objetivo para 2016: "Intentar alargar al máximo lo que hice en los primeros meses de 2015. Ya sabemos cuál es el camino porque lo hemos vivido y hemos aprendido de los momentos difíciles. Sabemos la exigencia que requiere y me veo preparada para volver al top-10 y acabar el año en él, incluso jugando el Masters. Tengo la madurez y la experiencia, que ayudan mucho".

La número 13 del mundo acabó la entrevista asegurando que no sintió vértigo la temporada pasada pero: "Nunca había ganado tantos partidos y de exigencia máxima. Esa primera gran mitad de año me produjo un desgaste físico y mental y no supe corregirlo a tiempo mentalmente. Cierto que me perjudicó mucho en el balance general final del año, pero también digo que haberlo vivido debe ser un buen aprendizaje para 2016".