Ya no hay atisbo de lesiones, embarazos, cansancio psicológico o físico. Solo hay una imagen en la cabeza de Serena Williams, un objetivo: el torneo. Cuando la estadounidense está en forma sigue siendo una jugadora inabordable para las demás, que saben que su mejor tenis quizá no las sirva para derrotarla.

Y es que Serena infunde respeto e incluso miedo, cuando se la ve con la actitud y el juego del que está haciendo gala en este torneo. Llegaba con muchas dudas pero las ha ido disipando a base de partidos pluscuamperfectos. 

Nada pudo hacer Gasparyan

Fue una de las sorpresas positivas del torneo, pero poco se puede hacer ante una jugadora como Serena. A sus 33 años, la rusa ha hecho el mejor tenis de su vida, pero no pudo rendir a su máximo nivel ante la estadounidense.

Serena estuvo excelsa con su servicio, cosechando un 75% de los puntos con primer servicio, y haciendo casi imposible a Gasparyan, mostrarse traviesa al resto. Hubo alguna alternativa en el tramo inicial de partido, pero en cuanto Serena comenzó a carburar, no hubo ninguna opción para la rusa.

Sharapova será su rival en cuartos de finalCon un parcial de 11-1 en juegos, la estadounidense certificó su acceso a cuartos de final dejando tras de sí un reguero de golpes ganadores y tremenda confianza. Habrá de esta preparada para afrontar un encuentro de alto voltaje ante Sharapova. Tiene comida la moral a la siberiana, pero habrá de jugar a su mejor nivel para imponerse a la rusa.