Muy pocos en el circuito ATP pueden parar en estos momentos a Roberto Bautista. El tenista castellonense confirmó su buen comienzo de año tras vencer por 6-4 y 6-3 al francés Adrian Mannarino en un encuentro que se alargó a la hora y ocho minutos de encuentro, en un gran partido de tenis y donde ambos tenistas jugaron a un nivel estratosférico, pero el tenista español decidió en los puntos importantes.
El español, primer cabeza de serie del torneo, se mostró sólido al saque durante todo el partido (no encaró ninguna bola de break) y rompió el servicio de su contrario en dos ocasiones (una en cada set) para firmar su clasificación hacia las semifinales de la cita búlgara.
El partido comenzó muy igualado con ambos tenistas manteniendo con gran firmeza sus respectivos saques y con un Roberto Bautista muy concentrado en el partido, con su derecha invertida como mejor golpe. Adrian Mannarino por su parte jugó un tenis más directo, con una gran cantidad de número de saques directos y de puntos conseguidos en la red. Cuando el partido iba 4-4 en el primer set apareció la imagen de Roberto Bautista para conseguir romperle el servicio al francés y cerrarlo con un juego en blanco con su saque.
El segundo set comenzó con un Roberto Bautista decidido a dejar sentenciado el partido por la vía rápida. En el segundo juego tuvo hasta tres oportunidades de quiebre, pero Mannarino se recuperó y consiguió salvarlas todas. Olía a que iba a ser un partido de idas y vueltas pero volvió a aparecer la raza, el orgullo y el coraje de Roberto para volver a romperle el servicio al francés y coger una ventaja en el marcador que iba a ser definitiva.
A Bautista le espera ahora el luxemburgués Gilles Muller, que superó por 7-6(6) y 6-4 al español Guillermo García-López y optará a una plaza en la final del domingo y poder conquistar el segundo título de este 2016.