Le está costando a Robredo recuperar la frescura de la que hizo gala en 2013 y 2014, cuando se erigió en el jugador de moda de circuito. Continúa buscando su mejor versión, pero tras un año 2015 bastante modesto, esta nueva temporada no ha comenzado boyante de buen juego y resultados. Rotterdam podía ser una gran oportunidad para recuperar confianza y progresar, y más tras la derrota de Goffin, potencial rival en segunda ronda. Pero Martin Klizan es un hueso duro de roer.

El eslovaco ostenta potencial para ganar a los mejores. Golpes realmente potentes, efectos de zurdo y gran servicio. El único resquicio por el que colarse es su cierta irregularidad, pero en torneos indoor, Klizan mantiene más la compostura al sentirse realmente cómodo amparado en el techo, y ni siquiera la reacción de Robredo en la segunda manga, le hizo despistarse.

Graves problemas al resto del español

Fue la clave del partido. Klizan estuvo bien al servicio, pero Robredo pecó de inmovilismo. Tuvo opciones de inquietar mucho más de lo que lo hizo, y no aprovechó las seis bolas de break de las que dispuso. Es muy difícil ganar un partido en esas condiciones, y aun así el gerundense lo peleó hasta el final.

La primera manga fue mucho más igualada de lo que muestra el marcador. Robredo llegó a tener hasta cuatro opciones de rotura, pero no se metió dentro de pista sino que recluyó esperando el fallo de Klizan. El eslovaco mantuvo la compostura y se mostró firme en momentos cumbre, haciendo él dos breaks. 

El veterano jugador catalán siguió intentándolo y afinó su servicio. Se mostró mucho más firme y concentrado, pero seguía sin encontrar resquicios al resto. El set se fue inexorablemente a un tiebreak definido por pequeños detalles. Robredo estuvo mejor y pudo coger su derecha en largos intercambios, imponiendo su ley y equilibrando el marcador.

Baghdatis será el rival de Klizan en segunda ronda

En el parcial definitivo, se vio que no era el día de Tommy. Klizan, lejos de amilanarse, siguió jugando con gran intensidad y apretó las tuercas del gerundense en cada turno de éste al servicio. En el cuarto juego se produciría el break, después de desconcertar a Robredo con dejadas inesperadas por parte del pegador eslovaco. No tuvo argumentos el español para recuperar la desventaja y vio cómo era apeado del torneo a las primeras de cambio. Habrá que seguir trabajando para sumar puntos en estos torneos; es una gran incógnita cómo está de motivación Tommy, siendo éste el pilar fundamental para el rendimiento de un jugador veterano como él.

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Sobre el autor
Diego Jiménez Rubio
Fui Coordinador General de Más Deportes y Viajes, y miembro del Consejo de Dirección de VAVEL España. Me encanta comunicar mi pasión por el turismo y el deporte, y hacerlo con responsabilidad y profesionalidad.