Después de participar en el Open de Australia con distintas suertes, cabe recordar que Rafael Nadal cayó en primera ronda ante su compatriota Fernando Verdasco, y David Ferrer se tuvo que conformar con llegar a cuartos de final, donde perdió ante el británico Andy Murray, tanto el manacorí como el de Jávea comparecen en el Argentina Open partiendo como cabezas de serie número uno y dos del torneo argentino, siendo los tenistas a seguir, pero no los únicos, dado que Jo-Wilfried Tsonga y John Isner les harán la competencia como máximos favoritos.
Mónaco pasó por encima de Cecchinato
Partiendo como uno de los tenistas más queridos por el público argentino, Juan Mónaco comparecía en el Argentina Open para medirse en la primera ronda ante el italiano procedente de la qualy, Marco Cecchinato, quien buscaría dar la campanada. No dio opción alguna de sorpresa Mónaco, quien saltó concentrado, sabiendo lo que hacer en todo momento para no dar esperanzas a su rival. En la primera manga el vendaval de juego impuesto por el argentino le llevó a dominar por 6-1, y nada cambió durante el segundo, en el que Cecchinato plantó un poco más de batalla, pero Juan Mónaco terminó llevándose el segundo parcial por 6-3, y por ende el partido por 6-1 y 6-3 en ni más ni menos que una hora y cuatro minutos de partido.
Tras el choque, Juan Mónaco compareció ante los medios de comunicación, mostrándose satisfecho tras vencer el encuentro ante Marco Cecchinato después de una larga lesión de muñeca: "Gracias a dios todo va muy bien, hace tres o cuatro semanas ya no siento molestias. Es una prueba superada, no pienso que vaya a volver a molestarme, mi sensación es buenísima, así que estoy muy contento".
Renzo Olivo se lleva el duelo argentino
Dos tenistas con muchas similitudes, y un ránking parejo, tenían la opción no solo de conseguir el pase a la segunda ronda del Argentina Open, sino también en juego estaba medirse a todo un top-10 como David Ferrer. Olivo y Bagnis se mostraron seguros con sus servicios en los primeros compases del encuentro, pero al final en una apasionante tie break fue Renzo el encargado de llevarse la muerte súbita por 11-9, el primer set por 7-6 (9), y con ello encarar con confianza el resto del encuentro, para que un break en los últimos compases le permitiera llevarse el segundo set por 7-5, y por ende el pase a la siguiente ronda por 7-6 (9) y 7-5 después de dos horas y doce minutos de partido.