Antaño Top-10 del circuito, Ernest Gulbis a día de hoy se encuentra en el puesto 80 del ranking ATP y se pasea por las canchas de tenis con más pena que gloria, buscando el talento perdido o la regularidad necesaria para conseguir cosas importantes en el mundo de la raqueta. Pero no hay manera. Los fantasmas de una carrera frustrada asolan la mente del letón y están empezando a convertir cada partido suyo en una pesadilla. Esta vez, Gael Monfils fue quien la personificó.

Gael Monfils registró un 79% de puntos ganados con el primer servicio y un 2/3 en ocasiones de break para llevarse el partido ante Ernest Gulbis, quien parece incapaz de recuperar la regularidad y el talento de antañoEl francés, quinto cabeza de serie en el certamen holandés, se deshizo cómodamente por 6-4 y 6-4 del letón para volver a la senda de la victoria, un camino de cual se desvió en el certamen de Montpellier, tras caer en primera ronda ante su compatriota Edouard Roger-Vasselin. Un break en cada uno de los sets fue necesario para prolongar la maldición de Ernest Gulbis, quien solo ha sumado una victoria este año en partido oficial en el cuadro principal de un torneo, (Montpellier, Quentin Halys).

Tras una igualada primera manga, en el séptimo juego del parcial, cuando el marcador reflejaba un igualado 3-3, llegaron las primeras ocasiones de rotura para el galo. Tras errar la primera, acertó con la segunda y se colocó con 5-3 y servicio para anotarse la primera manga.

Gael Monfils, quien registró un 79% de puntos ganados con el primer servicio, no se despistó en el último juego del set inaugural y siguió mostrándose superior en la faceta clave del partido: el saque. Sin más dificultadas que las presentadas durante el resto del parcial, el francés golpeó primero y se llevó 6-4 el primer set

Mismo guión en el segundo y definitivo parcial. Ante la impotencia de Ernest Gulbis para quebrar el servicio del galo, una rotura favorable a Gael Monfils sería necesaria para dirimir el envite. Y no tardó en llegar.

En el quinto juego, cuando Gael Monfils lideraba la manga 3-2, Ernest Gulbis se vino a bajo y cedió su turno de saque en blanco. Una vez más, el letón desapareció unos minutos de forma inexplicable, algo que le viene sucediendo a menudo desde comienzos del año 2015. Como si de una larga pesadilla se tratase.

Con los deberes hechos antes de tiempo, Gael Monfils ahora solo necesitaba no fallar con su servicio para obtener su billete a la segunda ronda del certamen holandés. Y no lo hizo. Ernest Gulbis no fue capaz de quebrar al galo y éste clamó el partido por un doble 6-4y se citará con Borna Coric en la segunda ronda.

Por otro lado, el letón prolonga su pesadilla una semana más, un mal sueño que mantiene el sufrimiento que eclipsó a una estrella emergente allá por 2014. Cualquier tiempo pasado fue mejor.