Novak Djokovic, el jugador más en forma del circuito durante estos dos ultimos años, sigue demostrando su poderío y capacidad de superación cada semana. Un depredador, no se cansa de ganar y no quiere bajar el pistón. La semana pasada se hizo con la corona en el Masters 1.000 de Indian Wells  y en Miami tiene todas las papeletas para proclamarse campeón de nuevo. 

El esfuerzo físico al que Novak se somete es brutal. No se da un respiro, y es que el llegar cada semana a la final tiene sus partes negativas. El jugar a ese nivel de tenis durante toda la semana, no permite recuperarte por completo, y es por ello que Djokovic tuvo que parar el encuentro y llamar al fisio. 

El jugador balcánico, actual número 1 del mundo, quiso quitar hierro al asunto sobre su espalda. Durante su partido de cuartos de final frente al checho Thomas Berdych, tuvo que ser atendido por el fisio del torneo durante un descanso. No le quiso dar importancia tras finalizar el encuentro. ''Debido a las condiciones de mucho viento que hubo durante el partido, encontré problemas a la hora de encontrar el ritmo adecuado para hacer mi movimiento de saque. No es nada grave, simplemente sentí unos espasmos pero el fisio hizo un gran trabajo y pude acabar el partido'' comentó Novak. 

''No creo que este problema me vaya a perjudicar en los siguientes partidos''

En vista al futuro, quiso dejar claro que no le perjudicará. ''Para nada, no'', aseguró

El de Belgrado piensa que ante Berdych jugó el mejor partido hasta ahora en Miami. ''Me siento mejor que el año pasado a estas alturas. Espero tener la misma trayectoria'' comentó. En semifinales se enfrentá al jugador revelación del año, David Goffin. ''Será un jugador muy peligroso pero tendré mis opciones'', afirmó. El belga está en un momento dulce, y no quiere bajarse del carro. En Indian Wells alcanzó las semifinal. Ambos buscaran hacerse un hueco en la final.  

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