La tenista alemana Angelique Kerber, vigente campeona, segunda máxima favorita a hacerse con el Porsche Tenis Grand Prix disputado en la tierra batida de Stuttgart y en la tercera posición del ranking de las mejores raquetas del panorama femenino mundial según la WTA, tuvo que pelear en su partido debut frente a su compatriota, Annika Beck, 41 del mundo, que plantó cara a su rival y consiguió empezar el encuentro apuntándose el primer parcial por 6-4. No obstante, a partir de ese momento Kerber tiró de garra y acabo imponiéndose en los dos siguientes y tras dos horas y nueve minutos se hizo con el pase a la siguiente ronda en Stuttgart con un resultado de 4-6, 6-3 y 6-1

En el desarrollo del partido, Kerber conectó tres saques directos y el mismo número de dobles faltas, por las cuatro de su oponente. Sin embargo, en la efectividad en el primer saque fue superior el porcentaje de Beck, de 73% frente al 57% de su contrincante. De igual forma, estuvieron equilibradas en cuanto a los puntos de rotura que cada una de ellas pudo salvar. En el caso de la nacida en Bremen pudo salvar su saque en siete de las trece oportunidades en que pudo hacerlo, mientras que su rival lo logró en once de las veinte ocasiones posibles, lo que les hace merecedoras de un porcentaje similar, 54% de Kerber y 53% de Beck. 

En cuanto al total de puntos conseguidos a lo largo del partido la diferencia fue clara, Kerber fue superior a su rival, apuntándose 102 por los 87 de Beck. Así, en los conseguidos con el saque figuraron 45 de 87 para la segunda cabeza de serie por los 45 de 102 de la 41 de la WTA, mientras que con el resto se apuntaron un total de 57 de 102 para Kerber por los 42 de 87 de su oponente en el partido. Ahora, la número tres del mundo tendrá que medirse ante la vencedora del duelo en el que se enfrentarán la española Carla Suárez, séptima cabeza de serie y undécima del ranking mundial, frente a otra alemana en competición en este torneo, Anna-Lena Friedsam, 52 en la clasificación del mundo.