Capaz de lo mejor y de lo peor. Así es este jugador tan necesario en el circuito, que despierta odios y pasiones a partes iguales, pero sobre el que nadie puede negar que tiene un talento inconmensurable y cuando éste fluye, es preciso rendirle pleitesía. Fognini ya ha sido el azote de Nadal en más de una ocasión, y parece haberle cogido el gusto. En la antesala del duelo más esperado del torneo, el italiano brilló con luz propia, sometiendo a un Troicki lejos de su hábitat cuando juega sobre tierra batida.

A sus 28 años, el de San Remo es 31 del mundo pero es uno de los jugadores a los que aparentemente más sin cuidado le trae la clasificación. Él sabe que todo depende de su actitud; cuando está concentrado puede dar un disgusto a cualquiera, pero si se dispersa resulta un caramelito en dulce. En su primero duelo en Barcelona acabó imponiéndose a pesar de una dispersión de órdago; ante Troicki ya comenzó a preparar uno de esos partidos que motivan al italiano.

Recital técnico de Fognini

No es fácil definir el talento, un intangible tan necesario como insuficiente por sí mismo para triunfar en el tenis. Sin embargo, cuando se ve jugar a Fognini uno puede hacerse a la idea de lo que es. Golpes imposibles, elegancia en la ejecución, tiros imprevisibles y capacidad para hacer cosas al alcance de no muchos. Así juega Fabio, que hoy decidió destapar el tarro de las esencias.

El italiano puso de manifiesto un amplio repertorio de golpes y se movió bien

Poco pudo hacer Troicki ante semejante arsenal de golpes, más que acogerse al carácter volátil del italiano. Tuvo sus opciones Viktor, con dos bolas de break en cada set, pero no contó con la chispa necesaria para adjudicárselos y dar un vuelco al partido. Fognini estuvo más estable de lo habitual y cerró por la vía rápida un partido muy bonito para el aficionado.

Ya espera Nadal, con ganas de vendetta después de sus tres derrotas ante el italiano el pasado año, produciéndose una de ellas en esta misma pista. El balear está dando buenas sensaciones, mucho mejores que el pasado año, y ambos estarán tremendamente motivados. El espectáculo está asegurado.