A falta de una gran estrella, el tenis italiano mantiene un tono general qu sube exponencialmente cuando comienza la tierra batida. Especialistas consumados en dicha superficie, incrementan sus opciones de ganar partidos y se erigen en jugadores realmente peligrosos en torneos del calado del de Bucarest. Sin embargo, ni Lorenzi ni Cecchinato han logrado el acceso a unas semifinales donde se habrían podido enfrentar, asegurando la presencia de un italiano en la final del evento latino. Habrán de seguir trabajando y confiar en que su rendimiento en el torneo de Roma les permita darse alguna alegría.

Pouille sale victorioso de un duelo de tú a tú

No muchos jugadores con peor ránking que el italiano, son capaces de plantarle cara en un partido largo e intenso sobre tierra batida. Ese es el hábitat natural de un guerrero nato como Lorenzi, que en estos cuartos de final del torneo de Bucarest, se encontró con la horma de su zapato.

Lorenzi fue a remolque desde el segundo set pero luchó hasta el final

Y es que Lucas Pouille salió a pista henchido de confianza tras imponerse a Ivo Karlovic en la ronda precedente. El galo está cuajando un año muy bueno, notándose una clara evolución en su juego y postulándose para el asalto al top-50. Está en disposición de hacerlo si prolonga su idilio con el polvo de ladrillo rumano. Ya está en semifinales tras protagonizar un apasionante duelo, en el que logró remontar una desventaja inicial de un set en contra. 

El duelo tuvo alternativas constantes, con ambos jugadores presionando mucho con el resto y favoreciendo peloteos largos e intensos. Pouille necesitó de varias bolas de partido para ganar, pero demostró gran madurez al no venirse abajo al ver cómo Lorenzi le remontaba un 5-2 en el set definitivo. El galo tuvo la sangre fría como para dar un zarpazo definitivo en el duodécimo juego, y obtener su pase a la penúltima ronda.

Delbonis se da un homenaje

El argentino está jugando a gran nivel en este 2016, como ya demostrara en Marrakech, donde se proclamó campeón. A sus 25 años, este plástico jugador parece haber alcanzado su madurez, y estar en el mejor momento de su carrera. Imprimiendo a la bola mucho efecto, ayudándose de la ventaja de ser zurdo y demostrando una gran inteligencia en pista, Federico no tuvo problemas ante un frágil Marco Cecchinato.

El argentino ya ganó en Marrakech, y quiere seguir ampliando su palmarés

El menudo jugador italiano se vio superado por los golpes profundos y altos de Delbonis, que se impuso por 6-2 6-2, postulándose como claro favorito para ganar el título. Habrá de estar muy atento a lo que pueda hacer contra él, un Pouille que viene en tendencia claramente positiva.