Uno de los tenistas que mejor temporada está realizando sobre la superficie de tierra batida, es sin duda Dominic Thiem. El joven tenista austríaco comenzó con victoria su participación en el ATP 250 de Munich tras vencer por 7-5 y 6-4 ante el colombiano Santiago Giraldo en un encuentro muy vistoso y con mucha alternancia de buenos puntos que desplegaron una enorme espectación sobre la pista central.

Es un jugador completo donde los haya, capaz de jugar bien en cualquier superficie y que es consciente de que el camino para la gloria es el orden en las ideas, y la elección de golpe preciso en cada momento. No se obceca en la búsqueda directa del ganador, e imprime efectos a la bola realmente diabólicos. Hace apenas mes y medio durante la gira latinoamericana, el tenista austríaco pasó a la historia como aquella en la que Thiem ganó dos torneos y venció a jugadores como David Ferrer o Rafael Nadal, sin duda especialistas en esta superficie y que tantos torneos han conseguido levantar a lo largo de su carrera deportiva. Al austriaco solo le queda plasmar estas sensaciones en torneos Masters 1000 y Grand Slam. Si lo consigue, puede aseverarse que el futuro ya es presente.

El partido comenzó con mucha igualdad por parte de ambos tenistas, manteniendo con gran firmeza sus respectivos saques y sin apenas crear problemas al de su rival. A medida que pasaba los minutos, Thiem se mostraba más seguro desde el fondo de la pista. Para un país huérfano tras la decadencia tenística de Jurgen Melzer, la aparición de este joven jugador de 22 años ha sido todo un bálsamo sanador, que se espera que pueda prolongarse en mayor medida a lo largo de las próximas temporadas. Con empate a cinco en el marcador, el tenista austríaco consiguió romperle el servicio a su rival y con su servicio cerrar el primer set por un parcial de 7-5.

Tenía que reaccionar Santiago Giraldo si no quería verse eliminado a las primeras de cambio en este torneo, por lo que decidió jugar algo más agresivo con su drive a mitad de pista, pero Thiem tuvo su día y supo reaccionar ante las acometidas del tenista hispanoamericano. Una rotura en el noveno juego fue definitiva para que Thiem consiguiese continuar su idilio sobre la tierra batida donde tan solo ha perdido un partido en lo que llevamos de temporada, ante Rafael Nadal en el Master 1000 de Montecarlo.

Su rival en cuartos de final será el croata Ivan Dodig que en el día de hoy consiguió vencer de manera sorprendente al brasileño Thomaz Bellucci por 7-6 y 6-3. Recordemos que el tenista croata apenas tiene experiencia en la modalidad de individuales, siendo un tenista clave en dobles donde ha compartido carrera contra el ex número uno del mundo Marcelo Melo.