La tenista norteamericana Serena Williams, máxima favorita para hacerse con el Abierto de Roma y situada en el primer puesto de la lista de las mejores raquetas del panorama femenino mundial según la WTA, se deshizo en su partido de su rival, la alemana Anna-Lena Friedsman, 50 de la clasificación mundial a la que la estadounidense superó en dos parciales, 6-4 y 6-3, tras una hora y 15 minutos de duración. 

En el desarrollo del partido, fueron siete saques directos para Williams por los seis de Friedsman, mientras que en cuanto a las dobles faltas fueron dos para la líder de la WTA y una para la germana. De igual modo, en los puntos de saque salvados, la norteamericana se impuso con un porcentaje muy superior, ya que dispuso de menos oportunidades a pesar de que aprovechó las mismas que su rival. Es decir, la estadounidense ganó en una de las dos ocasiones en que pudo hacerlo,mientras que su oponente hizo lo propio en una de las cinco veces en que pudo lograrlo. Así, en el total de puntos ganados a lo largo del enciento resultaron 68 y 47 para Williams y para la 50 de la WTA. De los logrados con el saque fueron 37 de 49 para la número uno del mundo y 35 de 66 para la alemana, por los conseguidos con el resto que figuraron 12 de 49 para Friedsman por los 31 de 66 para la vencedora de este encuentro. 

Con esta victoria la estadounidense vuelve a la competición tras haberse dado de baja y no asistir al Mutua Madrid Open, disputado sobre la tierra batida de la Caja Mágica. No obstante, Williams en su camino hacia Roland Garros, segundo Grand Slam de la temporada quiere hacerlo bien, disputar con buenas sensaciones su tenis en el Foro Itálico. De momento, en la próxima ronda tendrá que verse las caras ante la vencedora del duelo en el que se medirán la serbia Ana Ivanovic, décima sexta del mundo y la compatriota de Williams, Christian McHale, 56 de la WTA.

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